Yo veía esta película cuando era muy pequeño. No me cansaba de verla e incluso hoy en día, me sigue pareciendo una peli extraordinaria.

Estará dirigida a niños pequeños, no obstante, la película engancha de principio a fin tanto a los niños como a los adultos por las siguientes razones:
-Los personajes son súper simpáticos. Boby es un perro alegre y juguetón que se hace hermano adoptivo de unos conejos que son igual de carismáticos que él. Uno de dichos conejos es un poco cascarrabias, pero al igual que sus hermanos, tiene gran corazón.
-La historia de la película te hace reflexionar lo siguiente: La familia y los amigos son tus mejores aliados, no deberías abandonarlos y ellos te ayudan cuando más lo necesitas.
-Hay momentos que son bastante graciosos y divertidos, como cuando el conejo glotón se come todos los alimentos que se encuentra.
-No todo lo que hay en esta cinta es “color de rosa”, también hay, por supuesto, momentos en los que aparecen enemigos intentando salirse con la suya de forma bastante brusca.

Lo único mejorable es la animación, un poco desfasada para la época en la que salió, aunque claro, siendo una producción de Hungría, no podíamos esperar mucho en este aspecto.

Es una gran lástima que en la actualidad, esta película sea muy difícil de conseguir en español. Yo la encontré completa en YouTube, pero sólo en inglés y en alemán. Deberían sacarla en España en DVD, Blu-Ray y en formato digital, como si lo hicieron en países como Alemania.

También me parece triste que en la actualidad ya no se hagan películas de animación 2D tan simpáticas y educativas. Hoy en día la animación es puro CGI y “momentos graciosos” de eructos y pedos.

Padre de familia es una de las primeras series de animación para adultos que disfruté. En plena adolescencia me enganché al humor negro de este show, sus personajes me sacaban sonrisas cada dos por tres e incluso me encantaban sus canciones.

Muchos acusan a esta serie de ser un plagio de los Simpsons. Admito que tienen muchas similitudes, pero a su vez, Padre de familia contiene estilos de humor bastante originales, como por ejemplo, los "flashbacks" de humor absurdo, que me parecen muy ingeniosos.

Mis personajes favoritos son Peter, Stewie y Quagmire. Los demás también tienen una gran carisma, exceptuando quizás el padre de Peter. Me parecen muy destacables las escenas de Stewie planeando ideas malvadas y casi siempre fracasando.

Los argumentos se desarrollan de forma algo similar a los de Los Simpsons, aunque Padre de familia añade algunos elementos más obscenos a la hora de plantear los acontecimientos.

Actualmente, la serie cuenta con muchas temporadas. Quizás las nuevas sean argumentalmente inferiores a las antiguas, pero tecnicamente, por supuesto que son superiores.

Algo que no me gusta de la serie es que a veces es cierto que sus chistes son ofensivos, como cuando se meten con los religiosos, costumbres sociales, discapacitados, etc...

A pesar de esto último, es una serie animada que recomiendo a todos los que quieran echarse unas risas con un poco de humor negro.

Así llamo yo a esta serie de mis ídolos. En 1996, cancelaron la serie original de las Tortugas Ninja y por lo tanto, estuvieron pasadas de moda durante un largo tiempo, hasta que finalmente, en 2003 reviven esta magnífica franquicia.

La característica principal de esta serie es que es mucho más fiel al cómic original de los 80 que la serie del 87. Por ejemplo, la historia: tanto esta serie como el cómic empieza con una pelea con unos delincuentes y luego una lucha con "mousers" en las alcantarillas.

Aunque también eliminaron cosas que surgieron por la serie del 87 y que caracterizaban a las tortugas, como la adicción a la pizza y la famosa frase "cowabunga", ya que ambas no estaban en el cómic.

Los personajes son mucho más serios, por suerte, las tortugas tienen las personalidades del cómic, aunque siguen siendo carismáticas y con gran sentido del humor.

El doblaje español me parece bastante bueno (mucho mejor que el de la serie del 87) y la animación es excelente para su tiempo.

Es una lástima que esta serie haya sido tan infravalorada, principalmente por los nostalgiafags de la serie de los 80.

Si hay algo que me pregunto muy a menudo hoy en día es lo siguiente: ¿Por qué se hizo esta película? ¿Por qué y para qué? ¿Era realmente necesaria? ¿Y también era necesaria ponerla en los cines?

Para empezar: ¿Cuál es el argumento de esta película? ¡Ni siquiera tiene argumento! Es sólo un "remake" y un recopilatorio de capítulos clásicos de Doraemon, y claro, no debía faltar el de "Adiós, Shizuka", que por lo menos tenía ya como tres versiones y con ésta ya van cuatro.

No es que esté mal hecha, que técnicamente está muy lograda. Los gráficos CGI destacan, aunque algunos personajes me dan un mal "yuyu".

El doblaje español, exceptuando obviamente el de Alaska y Mario, es aceptable, pues es el mismo que el de la serie de televisión.

Curiosamente, también incluía el apodado "último episodio de Doraemon", que no pienso dar más detalles sobre eso porque seguro que ya lo conocéis. Ese episodio lo vi una vez en "Boing".

Una película aceptable para los niños, pero para los que ya nos conocemos a Doraemon como la palma de la mano no es nada necesaria.

La película de Dreamworks "Turbo" era un largometraje animado más del montón. No era nada especial y tenía un argumento muy visto en muchas otras producciones y encima que le hayan hecho una serie de televisión ya es el colmo.

Para empezar, los personajes se ven fatal, debido a que esta vez están hechos en 2D (no estoy seguro si es "Adobe Flash" o "Toonboom") Si la serie se hubiese hecho en CGI, seguro que se verían bastante mejor.

Los argumentos de los episodios no son nada llamativos y no creo que entretengan a los niños, que se supone que son el público objetivo de la serie.

Parece que cambiaron las personalidades de los personajes. En la película no actuaban de una forma tan absurda e infantil.

El doblaje español de la serie no es el mismo que el de la película, lo cual es un pecado muy gordo, ya que el doblaje de la "peli" era bastante bueno.

No me extraña nada que sea un fracaso.