Película ideal para llevar al cine a tu ligue de verano y que sepa de primeras que a tí, los films con contenido emocional y guión trabajado, ni fu ni fa.

En los primeros diez minutos una rubia tetona se subasta entre su novio y el prota para quien gane una carrera callejera se quede con ella. Toma ya. Así, es tan fácil hacer crítica de esta película como decir que en el cine hay filas de butacas.

Sean es un chaval de instituto ( su interprete Lucas Black tiene 24 años…) que, tras meterse en un lío de carreras ilegales debe emprender viaje a Tokyo para vivir con su padre y evitar la cárcel. Allí conocero otro tipo de carreras de coches, bastante más peligrosas, donde la mafia nipona es la última en tener la palabra.

Una película que intenta y no consigue, ser una COPIA del gran documental el viaje del emperador. Lástima que se quede a mitad de camino.

Durante los 90 minutos que dura, no es capaz de llegar al espectador y creo que aun menos a los niños.

El final de la película es bastante malo y creo que nada real ... Incluso los niños se darán cuenta que este final no adecuado para la película. Lástima ...

Una gran película que desde el primer minuto consigue tener en vilo al espectador. No hay un momento en que puedas desconectar de ella.

Una ambientación excelente, una música aun mejor y una brillante idea poder verla en versión original con subtítulos.

En resumen, vale la pena ir a verla no solamente por la historia (que para mi es espectacular) sino también por todo lo que hay a su alrededor.

Para empezar me gustaria destacar el reparto de viejas glorias de capa caida: Demi Moore, Sharon Stone, Christian Slater o Martin Sheen. También es verdad que hay otros más en forma, como Anthony Hopkins o Helen Hunt.

Lo mejor desde mi punto de vista el final gracias al gran tema de Simon & Garfunkel y a la velocidad con la que pasa todo el desenlace de la película.

Lo peor, el uso de imágenes de archivo intercaladas para una mejor inmersión en la época.

La saga Rocky ha acompañado a una generación pero ahora creo que los debería dejar de la mano.

Una película de 1 hora y 30 minutos en los que los primeros 60 minutos parecen un "Making Off" de las otras 5 películas. Y respecto al final, pues un entrenamiento sumamente corto y un final que es decepcionante.

Lo dicho, se acabó una saga y acabó tan mal como se podía esperar después de ver la quinta parte.