Mi película favorita de Tarantino, aunque siempre consideraré a Pulp Fiction lo mejor que ha hecho por su tremenda originalidad y estilo.

La historia de Jackie Brown ya nos la han contado un montón de veces, pero el buen hacer de su director unido al mimo con el que trata a estos personajes la convierten en una de las mejores películas de enredos de su década, saliendo bien parada en todos los géneros que mezcla, que por cierto son numerosos, thriller, drama, intriga y comedia.

Es puro cine de actores y diálogos, a mi modo de ver todos bordan sus personajes (salvo tal vez Bridget Fonda), hay un montaje y sentido del ritmo prodigiosos, con tempos perfectamente medidos, golpes de humor geniales y escenas buenísimas que serían una completa sandez si el director fuese otro, por lo cual reincido en que aquí Tarantino estuvo muy inspirado en la dirección. Destacaría a Robert Forster que es capaz de expresar muchísimo incluso estando de espaldas y un divertidísimo Samuel L. Jackson en estado de gracia.

Buena banda sonora y un final para el recuerdo.

La pelicula es mala, además de unos efectos especiales lamentables tiene un guión bochornoso lleno de errores, rompe toda la continuidad de las primeras dos peliculas, básicamente intentan borrar la 3 y 4 parte y todo lo que hacen es poner flashbacks de la 1 entrega, pero con CGI y copiando a James Cameron, luego ponen un montón de acción mal editada y actores bastante cutres que no encajan en sus roles. Arnold está demasiado viejo para el papel y no te crees que sea un Terminator en ningún momento. Los diálogos son bochornosos, los personajes no hablan ni se comunican, sólo escupen frases. Todo esto se debe a que los productores perderán los derechos de la saga en 2019, ruedan la primera gilipollez que se les ocurre para forrarse rápido y pasa lo que pasa.

Nueva demostración de las limitaciones de Wes Craven como guionista, es obvio que no pudo resistir la tentación de aportar su propio bodrio a la saga. ¿Original? ¿Una buena idea? Nooooooo, se trata de una sencilla vuelta de tuerca al argumento de la película original, en vez de hacerse reales las pesadillas aquí se hacen realidad los guiones.

Resulta difícil de creer el buen trabajo de Heather Langenkamp en la primera pesadilla viendo su acartonada interpretación en esta entrega. La película es pésima y una de las peores de la saga. El guión es incomprensible, las escenas de terror solo hacen que te descojones, los efectos especiales y el diseño de producción son los peores de toda la saga. La fotografía es horrenda y cada vez que aparece el hijo de Heather pegando berridos te dan ganas de meterte en la televisión para darle una paliza.

Algunos guiños a la primera parte tienen su gracia, pero sinceramente cuando las únicas escenas salvables de una película son las que ya habíamos en su versión original, acabas preguntándote si realmente era necesario rodar semejante despropósito.

En su momento me decepcionó mucho y salí cabreado del cine pero el paso del tiempo me ha hecho cogerle cierta respeto a esta innecesaria tercera parte de Terminator. Al menos la acción está rodada de un modo más clásico, siendo más respetuosa con las entregas dirigidas por Cameron, tiene un saludable ritmo narrativo y los guiños que se incluyen a la saga tienen cierta gracia. Es de agradecer que se muestre a un T-800 con un comportamiento más robótico que el de la segunda parte, aunque sobra decir que Schwarzenegger con 56 tacos ya no estaba para estos trotes. Aunque hay algunos puntos de humor aceptables también tiene diálogos muy ridículos y por supuesto es una estupidez que hable sobre gilipolleces del destino, es lo que más molesta de esta entrega, que se pasen por el forro aquello de "No hay destino solo existe el que nosotros hacemos". Tiene más defectos, por supuesto, como la pésima banda sonora, el John Connor subnormal y la mediocre interpretación de Kristinna Loken, la historia resulta repetitiva y tiene varios agujeros, el ordenador canta demasiado en muchos momentos y realmente es penoso que tenga peores efectos especiales que Terminator 2, que fue rodada en 1990, de la cual copia descaradamente su estructura y acaba pareciendo un remake a lo cutre, pero... al menos es una película de acción aceptable y entretenida con las dosis de violencia necesaria, eso es más de lo que puede decirse de ese esperpento infantil y aburrido que es Terminator Salvation. Se deja ver, aunque cualquier comparación con las anteriores la deja en muy mal lugar. Muchos hablan de que el final es dramático y audaz pero lo cierto es que no es más que una excusa barata para seguir estirando la saga.

Thriller intenso, atrapante de principio a fin, buena historia que te hace pensar y contiene escenas de suspense más que logradas. No tiene grandes interpretaciones, Hugh Grant está soportable al menos, Gene Hackman aparece poco y cuando lo hace no cambia mucho de expresión, me parece el clásico actor que aporta nombre y se esfuerza en sus interpretaciones solo cuando le apetece.

Desde luego que la película también tiene clichés propios del cine de los noventa, pero es justo decir que aquí no molestan demasiado y está por encima de la media en cuanto otros thrillers de esa época. No será una obra maestra pero comparado con lo que se hace actualmente sale muy bien parada.