Cuando vi Moulin Rouge, allá por su estreno, me quedé prendada. Han pasado los años y ese flechazo temprano terminó en un amor de los de verdad, de los que no marchitan sino que se calman con el paso del tiempo, y en los cuales el fuego, su fuego, aunque ya tranquilo como el de un candelabro, sigue vivo. Moulin Rouge es mucho más que un drama romántico, para amarla, solamente has de hacer eso: enamorarte de la historia. Ahí radica su belleza. Al igual que ese candelabro que arde tranquilo, que prende con desgana y ya no explosiona.

Nicole es un "Sparkling Diamond", no sólo en su despliegue interpretativo, sino también en su belleza, que es rayana en lo soberbio. McGregor está estupendo en su papel de "bohème", incluso Leguizamo está acertado, al igual que el elenco de secundarios, a destacar Jim Broadbent, -no tan secundario-. Mención aparte a la espectacular puesta en escena, vestuario y banda sonora y, todos los que la amamos, haríamos un aparte y condecoraríamos el sublime "Tango de Roxanne".

¿Qué más nos queda? Simplemente vamos guiados, avisados, en realidad, hacia un final contado desde el principio. Y aún así, no dejamos de emocionarnos, ¿y esto por qué? Porque es una historia desde lo eterno y para lo eterno. Y el amor, contando de esa manera, gana la batalla a cualquier otra.

¿Y Si Satine viviese para emocionarnos de nuevo? he ahí la magia. Dale al replay, sumérgete en Moulin Rouge, ríe, llora; emociónate. ¿Es sólo una película? Error. Es lo que es porque es una película, y en ella Satine perdura, inmortalizada, resplandeciente, bella, recordada por Christian tal como ella fue.
Moulin Rouge está creada para hacer vibrar, sin distinciones, porque el amor no distingue; tan sólo escoge.

Lo cierto es que alquilé [REC]3: Génesis esperando encontrarme un peliculón, y no fue así. Por tanto acabé de verla y dije “menuda caca”. No obstante, reflexioné sobre mis pensamientos, y creo que en su contexto no es una mala película.
Yo soy de la opinión de que cada película hay que englobarla en todos sus aspectos (su época, su género, su fin etc) para juzgarla correctamente, y si hacemos eso con [REC]1, me parece una película de 10: es innovadora, da verdadero mal rollo, tiene un final acojonante y ese es su fin: entretener, dar miedo y ser original, y lo consigue con matrícula.
[REC]3 es diferente. Por tanto, era arriesgada. Pero otra vez debemos analizar su contexto. Esta película nos llega de la mano un autor español, y a nivel de lo que se suele hacer en España (esto es una opinión personal, una cuestión de mi gusto, ni siquiera de criterio), ese cine aburrido, digamos, en el que “no pasa nada” (las “españoladas”, como muchos las denomináis), es innovadora. Es una película de zombies técnicamente muy bien hecha y que no resulta española (ciñéndome a lo dicho antes), sin perder el sello propio de Paco Plaza y ese humor tan de aquí. En ese sentido la película está muy bien y tiene escenas para la posteridad como la de la motosierra (muy bien rodada, por cierto). Pero… ¿qué ocurre? Que es muy aburrida. Y ahí es donde [REC]3 no logra su mayor objetivo: entretener. Y entonces “la cagamos”, hablando en plata.
De todos modos me reitero en lo dicho, analizando todo esto, creo que aunque no es ninguna joya ni pasará a la posteridad, sí que es una película a tener en cuenta en este nuestro cine, y Dolera también, por cierto.

Despertares nos guía de la mano, a oscuras, haciéndonos creer que estamos viendo una película bonita, un poco tópica, para luego quitarnos la venda.