Es una pena ver a actores de la talla de Denzel Whasington o Jared Leto zambullirse en la mediocridad más absoluta al haber tenido la desgracia de protagonizar este aburrido, frívolo y mediocre film del otrora prometedor John Lee Hanckok. Con toques de Prisioneros dispersados por todo su metraje no le llega a esta ni a la suela del zapato. Un final totalmente prededicible apuntala por lo bajo la calidad de esta película. Pasará al olvido fácilmente.

Zack Snyder nos da una de cal y otra de arena. Mientras que su Liga de la Justicia fue todo un apoteosico acontecimiento ahora toca la de cal con este monumental peñazo que demuestra una vez más el exagerado amor que le tiene al manido slow motion. La vuelta a sus orígenes zombies no deja de ser la típica película de acción sin más chicha que la de ver a unos "supuestos" zombis más inteligentes de lo normal. Para pasar el rato y poco más.

Desde hace ya unos 20 años, más o menos, Robert De Niro lleva una carrera imparable hacia la mediocridad. Seguramente haga mierdas como la que ocupa esta crítica porque necesita dinero. Desde que protagonizara Los Padres de Ella ha ido acumulando títulos cada vez más vergonzantes (En Guerra con mi Abuelo, Dirty Grandpa, Caza Humana, El Becario, Malavita...), algunos de los cuales se pueden catalogar directamente como películas de Serie B. Dentro de esa constante ha tenido algunos éxitos que han suavizado en cierto modo el largo y tedioso proceso hacia la irrelevancian en el que aún sigue inmerso (El Irlandés, Joker...) La Última Gran Estafa, comedia convencional y carente de toda originalidad, no deja de ser otra muesca más de una carrera estancada desde hace ya dos décadas.

Los hermanos Russo, responsables de las últimas entregas de la franquicia de Los Vengadores, cambian de tercio abruptamente con esta disfuncional, atolondrada, poliédrica y enrevesada película que gira en torno a un muchacho, ex combatiente de la Guerra de Irak, que en su regreso a casa vive una serie de peculiares y, a ratos, aburridisimas historias con la droga y el robo en bancos como trasfondo. Tom Holland hace lo que puede con su personaje, una mezcla entre el Woddy Harrelson de Natural Born Killers y cualquier otro antiheroe de película random americana. Intenta salvar los muebles de esta debacle, pero sólo en contadas ocasiones lo consigue. Por lo demás, harían bien los Russo en aposentar sus miras cinematográficas en proyectos más sencillos de llevar a cabo y contar, y más disfrutables, como las citadas películas de Los Vengadores.

Todo el mundo está expectante ante el inminente estreno de Avatar 2, el no se qué del agua. Pero yo os digo que esta película, protagonizada por nuestro Antonio, es mucho mejor película que la segunda entrega de la saga pitufa de James Cameron. ¿Qué por qué es mucho mucho mejor película?, porque tiene mucho mejor guión e historia. No tendrá esos pomposo efectos digitales, con sus gafitas para verlos en tres d y demás estúpida parafernalia, pero tiene mucha mejor narración y guión.