Hay cosas que en un libro funcionan y que en la pantalla no lo hacen, y eso es algo que hay que tener muy presente si lo que se pretende es traer a la televisión en formato serie, un producto literario de gran éxito, porque críticas te van a caer por todas partes.

La serie, no el libro, peca un poco de soberbia, y ese exceso de confianza juega en su contra en el desarrollo. Por ello y por lo poco arriesgado de la puesta en escena hace que sea un producto que no destaque entre otros del mismo género. Por su parte, el elenco de actores, salvo alguna excepción, intentan como pueden defender a unos personajes con actuaciones un tanto exageradas e impostadas con poco desarrollo y recorrido argumental pero cargados de tópicos, quizá por ello ningún actor destaca por su excelencia.

Pero lo peor es que la trama se hace aburrida en demasiadas ocasiones con una narrativa un tanto incoherente y un ritmo, en general, extraño que falla sobretodo a la hora de presentar personajes.

Esperaba más de esta película, no así de su actriz protagonista, que tiene la misma expresibidad que un ladrillo durante todo el metraje y eso que se trata de la mejor interpretación de su carrera. Los demás actores son de atrezo, sin destacar en ninguna escena, tampoco es reseñable su presencia ni su interpretación.

No se como pueden comparar el film con los mejores de Brian de Palma, cuando esta película es aburrida y con una linea argumental cogida por los pelos con muy poco que contar. La mezcla de géneros suele ser una apuesta demasiado arriesgada porque normalmente, el resultado es catastrófico y, aunque aquí no se llega a ese nivel, tampoco se acierta, quedando la historia más interesante sin desarrollar, dejando otras sin sustanciar y desvinculando el resto de la trama con un simplismo argumental pasmoso.

El guión es bastante flojo y aunque permite en algunas escenas el lucimiento de la protagonista, esta las desaprovecha inexplicablemente. Lo único destacable es la presentación de la ciudad de Paris de un modo diferente al que estamos acostumbrados.

El abuso de los fundidos en negro para dar paso a un sinsentido de escenas acabará por ponerte de mala leche.

Para mi lo peor de este film son, sin duda, los actores, su química es cero absoluto, son planos y sin interés. A parte de esto, el guión flaquea en algunos puntos y sobre todo en los diálogos tan impostados y de teatro de colegio de primaria.

La idea era buena, pero algo tuvo que perderse en el desarrollo. Quizá en un remake mejore.

La película está mal hecha. Da igual por donde la mires y en que te fijes, no vas a encontrar nada aprovechable ni interesante.

El final, como en un truco de magia barato, lo sacan de la manga y no tiene nada que ver con el argumento principal. Si te parece poco, se añaden temas religiosos.

No la veas, a menos que odies tanto tu vida que quieras autocastigarte.

Ante todo, hay que tener en cuenta que el argumento no gira en torno a temas de ciencia ficcion, sino que utiliza elementos de esta como pretexto para contar un drama sobre la madurez, los vínculos paternofiliales y su peso en el desarrollo de la vida. Teniendo esto presente, la película deja bastante que desear en muchos aspectos, empiezas a darte cuenta de esto cuando ha sido necesario incluir la voz en off de Brat Pitt para explicar el comportamiento del protagonista.

La historia que cuenta es buena pero no sé hasta que punto era necesario utilizar naves espaciales para contarla.

Como película de ciencia ficción y naves espaciales te va a saber a poco, quizá se salve la persecución lunar, que aún siendo irrelevante para el argumento, está bastante conseguida.

No es una película mala, pero tampoco es una película imprescindible de naves espaciales. Además hay demasiadas exageraciones irracionales y escenas de pura fantasía extrema que olvidan la parte de ciencia del pretendido género y se quedan solo con la ficción, planteando hechos fantasiosos que rozan el ridículo.