Esta película me recuerda una faceta del séptimo arte que cada día tiene menos peso del que debería: el cine es básicamente contar una historia. Y es que cada día nos preocupamos más de que si el director se encasilla en el mismo tipo de películas, si es una versión mal adaptada de una novela... Por mi parte no. Lo primero, valorar la historia que te cuentan, y después, juzgar si los decorados, la fotografía, las interpretaciones, etc son de calidad.
El film en sí me ha parecido brillante, muy logrado; cabe destacar un uso del B/N magnífico. Ciertamente, cuando Burton no se acuerda de su cuenta corriente hace unas cintas de ensueño. Luego vienen las interpretaciones casi perfectas de Martin Landau como anciano chocheante y Johnny Depp como Ed Wood (sin calificativos), sin perder de vista la de todos los actores en general, no desentona ninguno.
Deliciosa en lo técnico y muy lúcida en lo artístico, cosa que Edward D. Wood, Jr., antigenio como no hay dos, nunca supo hacer; si bien esto es lo que hace a sus películas especiales.