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España España · Madrid
Voto de chechu:
6
Comedia A principios de los años veinte, Gerald Brenan, un joven idealista inglés, de familia noble, que aspira a ser escritor, llega a Yegen, un pueblecito de la Alpujarra granadina. Su propósito es aislarse del mundo, con dos mil libros como única compañía, y olvidarse de su etapa como oficial del ejercito británico en la I Guerra Mundial. Allí encuentra no sólo la paz que necesita para leer y escribir, sino también el amor de Juliana, una ... [+]
21 de julio de 2009
21 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gerald Brenen fue un escritor inglés que después de la Primera Guerra Mundial (en la que combatió) llega a Yegen, un pueblo de la Alpujarra granadina, buscando un lugar inhóspeto y tranquilo para escribir. Una vez allí, se prendó del lugar y la forma de vida de sus gentes; lo que le valió para pasar en España gran parte del resto de su vida. La película supone una libre interpretación de la vida de Gerald en su primera etapa en España: la que vivió en Yegen. En esa época, Gerald era un joven aficionado a las grandes caminatas que se sorprende ante la diferencia cultural entre el mundo de alto estanding conocido por él y la españa más profunda llena de analfabetismo, cacequismo, y curas. Todo eso no impide que se quede maravillado por la joven que le hacía los quehaceres de la casa; a la que termina dejándola embarazada. Ese romance se ve suspendido cuando a las pocas semanas de embarazo Gerald tiene que volverse a Inglaterra. Tres años más tarde, un Gerald Brenan casado con otra mujer vuelve a por la niña.

Primeramente hay que recalcar que aunque la historia cuenta en lineas generales los sucesos acontecidos en la realidad, estos no sucedieron exactamente como se ven reflejados. Gerald Brenan más que admiración, sentía pena por los habitantes de Yegen. Además tampoco era tan buena persona como se indica. La película cuenta la relación entre Gerald y Juliana de forma muy romántica cuando la realidad es que esa chica fue utilizada por Gerald. Tras regresar a España, Gerald se llevó a Helena porque no podía permitir que su hija fuera educada por unos ignorantes; es más, rechazó el nombre de Elena puesto por Juliana y la nombró Miranda.

Otra cosa que no se corresponde con la realidad es la falsa realidad érotico-festiva existente en la cinta: es inconcebible eso en una sociedad dirigida por la moral eclesiástica. Visualmente se agradecen los desnudos integros de una belleza como es Verónica Sánchez, pero como ya he dicho no tienen ningún sentido. Tampoco tiene mucho sentido que una mujer de 30 años ( la edad de Verónica) interprete a una niña de 15, ni los para nada logrados acentos (especialmente cantoso es el de Guillermo Toledo).

Resulta curioso que también se mienta sobre la identidad de las personas que le visitaron. La segudna visita que recibe no fue realizada por los primeros que le visitaron (Dora Carrington y Lytton Strachey) como cuenta la película, sino por Virgina Woolf (sí, la famosa escrtora) y su marido.

Por el resto, muy bien aprovechados los paisajes de la alpujarra granadina, una gran interpretacción de Verónica Sánchez, y un Antonio Resines que desde que interpretó al padre del del uno más uno son siete no hace que repetir el mismo personaje.
chechu
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