Y para manía, la que le tengo yo a ésta película, precisamente por eso. Cuando la ví en el cine por primera vez, me encantó. Es prácticamente perfecta en todos los sentidos y seré idiota, pero yo era de las que no esperaban el final. Lo único que no le perdono es que a raíz de su éxito la mayor parte de los "Shyamalanmaníacos" que nacieron subidos al carro de ese éxito, se han sentido decepcionados tanto por las sucesivas obras del amigo indio como por las precedentes.
Evidentemente, eso no es imputable a ésta fantástica cinta, pero es digno de lamentar que un sector importante de esos supuestos "seguidores" no hayan entendido absolutamente nada de lo que ofrece Shyamalan y no hayan visto más que un film de terror bien construído que los ha levantado del asiento en un par de ocasiones y los ha sorprendido con un final inesperado. Y es que ni "The Village", ni "El incidente", ni "Señales", ni "El protector" (que son las que he visto hasta ahora) deberían considerarse decepcionantes por inferiores a ésta.

En cualquier caso, el modo en que ésta cinta transmite esa atmósfera de tristeza y soledad, las impecables interpretaciones de los actores principales e incluso de los no tan principales, con el handicap añadido de trabajar con un niño como protagonista, la coherencia de guión y montaje (¿por qué se insiste en hablar de "trampas"?), hacen de éste film una obra que en justicia debería pasar a la Historia del Cine, con mayúsculas.

Gran película, pero insisto, no es la única grande de Shyamalan.

Si aún no la has visto y a éstas alturas nadie te ha destripado el final, corre a verla.