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España España · Valencia
Voto de Carorpar:
6
Thriller. Drama Ciudad del Cabo, las calles más peligrosas del mundo. En una Sudáfrica atormentada por el apartheid, dos policías investigan el asesinato de una adolescente, hija de un famoso jugador de rugby local. La joven llevaba aparentemente una vida ordenada, pero los forenses encuentran en su cuerpo restos de una nueva y devastadora droga. Ambos detectives deberán introducirse en el despiadado mundo de las bandas mafiosas dedicadas al tráfico de ... [+]
15 de septiembre de 2015
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“Zulu” fue enviada ―arrojada, cabría decir― directamente al mercado doméstico sin haber sido estrenada en salas españolas. Lo cual no resulta tan extraño, toda vez que estamos ante un thriller francés ambientado en Sudáfrica y a cuyo variopinto elenco se le presuponen muchas cosas salvo un maridaje particularmente fértil.
No obstante, sorprende con algunos elementos de indudable interés, como que un mugriento Orlando Bloom justifique por fin su inflado, casi tumefacto caché merced a un papel escrito, a priori, para cualquier otro ―no ya actor, sino ser vivo incluso― y en el que, sin embargo, logra un desempeño notable.
Pese a algún que otro desliz argumental ―sobre todo el sobado recurso al “científico loco”, por pueril de todo punto innecesario― Jérôme Salle, su director, expone la intriga con eficacia, salpicándola con los fogonazos justos de violencia y dotándola de un ritmo razonable ―aptitud, esta última, que parece desterrada de las escuelas de cine, para desgracia del espectador satisfactoriamente hominizado.
Todo ello viene sazonado con la denuncia social de rigor ―hablar de Sudáfrica y no remitirse al Apartheid, o a sus indeseables reminiscencias, constituiría un cinismo siquiera imaginable (hoy día).
Además, el citado ―e insisto que, por una vez, correcto― Bloom encuentra réplica ―a la inversa, más bien― en el siempre ejemplar Forest Whitaker, quien compone un personaje simplemente maravilloso. Recomiendo ―siempre lo hago, pero más si cabe en este caso― la versión original, ya que sólo así puede apreciarse el esfuerzo de dicción del texano Whitaker para sonar como un zulú genuino.
Carorpar
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