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España España · Valencia
Voto de Carorpar:
9
Ciencia ficción. Terror De regreso a la Tierra, la nave de carga Nostromo interrumpe su viaje y despierta a sus siete tripulantes. El ordenador central, MADRE, ha detectado la misteriosa transmisión de una forma de vida desconocida, procedente de un planeta cercano aparentemente deshabitado. La nave se dirige entonces al extraño planeta para investigar el origen de la comunicación. (FILMAFFINITY)
10 de agosto de 2012
13 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un Ridley Scott en plena forma- han pasado dos años desde "Los duelistas", faltan tres para "Blade Runner"- se rodea de lo mejor de cada casa- Jerry Goldsmith, Dan O´Bannon, H. R. Giger, Moebius- para crear una obra maestra, la sci-fi definitiva.
"Alien" hace procrear a la ciencia-ficción de diseño con el terror psicológico y la exploitation. El fecundo producto de tan enfermizo triángulo es una cinta sin la cual resulta imposible comprender buena parte del cine del último medio siglo, un título seminal y, a la vez, insuperable. Porque apenas nunca antes, en menos de dos horas de metraje, se habían dado a luz tantísimos iconos reconocibles incluso por el más lego; a bote pronto y haciendo un esfuerzo cronológico: la "Nostromo", el croissant espacial, el "space jockey", el "facehugging", el nacimiento de la criatura, la propia criatura- fálica maravilla sin ojos ideada por el genio Giger-, y, cómo no, la teniente Ripley encarnada por una joven Sigourney Weaver, cuyos rostros se confundirán desde entonces y para siempre.
Ridley Scott crea una atmósfera malsana, claustrofóbica como los tubos de ventilación de la "Nostromo", en el interior de una nave oscura, polvorienta, con goteras y deliciosamente analógica infinitamente más creible que los delirios digitales contemporáneos. Dicha atmósfera se convierte en un canon imitado hasta la saciedad y todavía hoy no superado.
"Alien" inaugura una larguísima saga que se prolonga hasta hace una semana, en que se estrenó la insultante "Prometheus", ninguno de cuyos títulos ha estado a la elevadísima altura a la que raya su "alma mater". De hecho, cada uno es peor que el anterior. Y es que estamos ante un film tan redondo, tan perfecto en cada aspecto, que sus 116 minutos agotan todas las posibilidades, tanto argumentales como estéticas como iconográficas como cinematográficas.
Carorpar
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