Fui a ver esta película al cine sin esperar nada más de una saga que ha sido exprimida al máximo a lo largo de los años. O lo que es lo mismo, no esperaba gran cosa de un título que se ha ido desgastando con el paso del tiempo.

En este nuevo Terminator lo único que cambia es el escenario en el que transcurre la acción y los rostros de los protagonistas. El resto es más de lo mismo.
La película en un principio despista un poco. Digamos que no se sabe muy bien de qué va la cosa. Luego, transcurridos los primeros 60 minutos, se van atando cabos.

Como entretenimiento no está mal. Como espectáculo pirotécnico-digital tampoco.
Eso sí, al final se repiten de manera un tanto solapada las mismas escenas que ya habíamos visto en las anteriores entregas.

En definitiva. El nuevo Terminator es un intento más de revitalizar una saga ya de por sí acabada con el único objetivo de hacer caja. Como un coche viejo con una nueva y resplandeciente capa de pintura.

Las nuevas generaciones tal vez creerán que están viendo algo nuevo. Pero para los que rondamos la treintena la cosa está ya muy vista.