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Luxemburgo Luxemburgo · Nacido en Barcelona
Voto de Yuee12:
8
7,4
33.613
Animación. Fantástico. Drama. Comedia ¿Alguna vez te has preguntado de dónde provienen tu pasión, tus sueños y tus intereses? ¿Qué es lo que te hace ser... tú? Pixar te lleva en un viaje desde las calles de Nueva York a los reinos cósmicos para descubrir las respuestas a las preguntas más importantes de la vida.
30 de enero de 2021
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pixar lo vuelve a hacer. En pleno 2020, la reputada compañía nos regala otra cinta de las que, para mí, pasará a ser reconocida como una obra maestra. Justo después de un primer visionado, uno que ha resultado intenso y único —lamentando únicamente no haber podido realizarlo en una sala de cine—, empiezan a surgirme la clase de preguntas que, a mi entender, todos deberíamos hacernos con cada película que nos es desconocida. ¿Qué es realmente una película? ¿A qué está sujeta? ¿Cómo podemos entenderla sin quedarnos en la superficie?

Es un ejercicio muy difícil de llevar a cabo, pero uno que, según yo, puede llevarnos a un mayor nivel de comprensión e incluso apreciación. Una película no es exclusivamente su historia o su apartado técnico. Opino que una obra que de verdad merezca la pena es aquella que empieza después de su primer visionado, así como, bajo mi punto de vista, toda buena película es la que te sobrepasa. Por supuesto, no me refiero sólo al intelecto. Hablo también de emociones y sentimientos.

Soul forma parte de esa lista.

La cinta habla de Joe Gardner, un profesor de música que se siente insatisfecho e infeliz en su vida. Tras un accidente que hace que su alma (de ahí el título de la cinta) se adentre en un mundo que le es hostil, y que lo hace debatirse entre la vida y la muerte, empieza a percatarse de que no ha estado llevando su vida de la mejor forma posible.

Obviamente, no podía faltar el elemento «imaginario» al que suelen estar ligadas las películas de Pixar. De ahora en adelante, voy a referirme varias veces a Del revés (2015), una de mis películas preferidas de todos los tiempos. En dicha película, también existe un mundo ficticio que funciona paralelamente y en coordinación con el real: las emociones antropomórficas —varios de nuestros personajes principales— están a cargo de la base de operaciones donde se gestionan los sentimientos y los recuerdos de Riley, y cada paso que dan se ve reflejado, de una forma u otra, en el mundo real. En Soul, ocurre algo muy parecido: las acciones de las almas impactan de forma directa en qué ocurre fuera de la zona ficticia.

De más está hablar largo y tendido sobre el apartado técnico de la cinta, no sólo porque alabar la portentosa calidad audiovisual de Soul sería banal y obvio, sino porque también nos sacaría de contexto. Sin embargo, la mención está más que merecida: a excepción de todo rasgo humano (a voluntad propia, desde mi punto de vista, de quienes están detrás de la película), cada edificio, cada objeto, cada paisaje podría ser perfectamente filmado por una camára y ni nos percataríamos siquiera de ello. Soul lleva los medios actuales de la animación 3D a un extremo muy, pero que muy prometedor.

La película empieza como Del revés lo hacía: con una breve introducción que nos sirve como, y, a la vez, precede el pasaje a sus términos mayores. De hecho, Soul respira como Del revés: con momentos dinámicos y llenos de movimiento; con pausas para dar ritmo; con momentos en los que todos nos rendimos a la maestría de Pixar a la hora de manejar nuestros sentimientos... Momentos que suelen ir acompañados por la soledad y por música que silencia todo cuanto es irrelevante. Sentir; ¡eso es lo que hay que hacer!

Como lo hacía Del revés, Soul se centra en temas bastante concretos. Del revés hablaba de las emociones, de la familia, de qué es ser un niño o un padre. En cierto modo, hablaba de la vida misma. No obstante, no se adentraba en el lado completamente opuesto: la muerte. Soul sí lo hace. Me recuerda, en cierta medida, a Final Fantasy IX: ambas historias comparten varias temáticas principales así como un mensaje concreto: «¡Vive!».

Porque Soul es vivir; Soul nos habla desde el alma y nos coge de la mano para hacernos ver que lo que a veces creemos es malo, es en realidad bueno; o que aquello que no importa, realmente sí importa. Final Fantasy IX hablaba de la vida y la muerte; se cuestionaba a sí mismo, se preguntaba qué es vivir, cuál es el propósito de nuestras vidas, por qué existimos... ¿Os suena, verdad? Soul sigue esa misma línea, aunque es posible que trate de responder de forma más tajante que el hoy día aclamado videojuego de Squaresoft. Por lo menos, las respuestas dadas cobran sentido para quienes viven la historia (es decir, los personajes).

Para mí, dichas respuestas también tienen sentido. En esta crítica, apenas he escrito unos pensamientos fugaces que necesitarán ser pulidos con el paso del tiempo. Probablemente, analizaré la película y sintetizaré todas mis ideas para entenderla mejor. Soul es digna de estudio, tal y como lo es Del revés y, a mi entender, la mayoría de cintas de la compañía. Si lo que buscáis es un viaje inolvidable, éste es un tren que no podéis dejar pasar.
Yuee12
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