Inefable el engranaje global de esta película inmaculada que no deja flecos superfluos ni prescindibles. Personajes logradísimos se mueven con gracilidad al son de una banda sonora fabulosa con unas canciones fantásticas. Interpretaciones impecables y numeros musicales divertidos y encomiables, sorprendentes, deslumbrantes, perpetrados por dos sublimes danzarinas: Catherine Zeta Jones y la risueña Zellweger. Muy divertido el papel del "invisible" John C.Reilly como esposo apocado y pelele de la ambiciosa y soñadora Roxie Hart. Queen Latifah demuestra sus grandes dotes para la interpretación y sobre el escenario, convertida en monumental diva de la canción como una especie de oronda Dionne Warwick. Richard Gere está realmente brillante en su adaptación de galán y truhán sin escrúpulos, incorregible, que vuela hacia los horizontes más lucrativos. Ingeniosas y mordaces las historias carcelarias en esta colosal adaptación del celebérrimo musical "Chicago". Muy lograda la rivalidad desdeñosa entre Zelwegger y la flamante esposa de Michael Douglas, luchando por la cota más egregia de un pedestal destinado a las más destellantes estrellas del cabaret, los escenarios y los números picantes al son de una música pegadiza y briosa.