Estaba claro que JAMES DEAN había forjado un ICONO de rebelde en las 3 magistrales películas que protagonizó pero aquí es casi un personaje secundario o al menos no es el principal. ¿Estaba destinado a cederle el protagonismo a estrellas de mayor renombre? Es lo que se traduce y es lo me sorprende un poco de este deshuesado film después de haberlo visto infinidad de veces.

La escena de la taza de te es emotiva y conmovedora pero por algún extraño motivo la película va perdiendo fuerza hasta hacerse un tostón de larga duración. ¿Qué le vamos a hacer? Tanto metraje es excesivo para lo que se pretende contar . . . una historia de herederos resabiados con una oculta ambición de la que no pueden escapar. Bien ¿pero qué más? ¿por qué conformarse con esto?

James Dean con solo 3 títulos a sus espaldas ya había caído en el cliché y se había encasillado casi como un actor veterano; la cosa no pintaba bien pero bueno, el chico lo intenta. ¿Qué más se le puede pedir?

3 películas interpretando el mismo perfil y un actor joven salido de la cantera del Actor's Studio codeándose al lado de estrellas más consagradas como Hudson o la Taylor etc. ¿Suficiente para llenar la pantalla? ¿Por qué no vemos a un JAMES DEAN más polifacético? ¿Por qué siempre el mismo personaje? ¿No es acaso otro Rebelde sin Causa? ¿No es acaso el mismo angel moribundo al otro lado del Paraíso? No niego ni discuto el talento del actor pero me hubiera gustado ver a un JAMES Dean diferente y más polifacético en esta ocasión. Ya todos conocemos al rebelde y al marginado ¿por qué no mostrarnos alguna otra faceta del actor?

Pd - Curiosamente y de forma un tanto morbosa y macabra GIGANTE es el único film donde podemos ver a un James DEAN envejecido aunque sea de forma poco natural y muy poco creíble, etc .