En los años 70 hubo un gran cambio en el cine. Se estrenó el primer blockbuster de la historia, Tiburón. Pocos años después vino Star Wars y junto a esta saga la moda de los efectos especiales. A día de hoy Spielberg y compañía han creado escuela. El problema es que mientras en los 70-80 Steven y cía nos ofrecían películas con sorprendentes FX acompañadas de una historia decente y buenos personajes, actualmente nos encontramos con películas muchísimo más espectaculares a nivel visual pero vacías por dentro.

El primer ejemplo que me viene a la cabeza es Avatar, muy bonita pero con un guión flojo y poco original. El caso es, ¿ocurre lo mismo con Tron Legacy?

Tron Legacy es la secuela de Tron, película de culto de 1982. El argumento tiene como protagonista a Sam Flynn (Garrett Hedlund). Su padre (Jeff Bridges) es al igual que él un experto programador pero hace mucho que no le ve. No sabe si está muerto, simplemente desapareció. Un día recibe un misterioso mensaje sobre su padre que le empuja a investigar en su antiguo despecho. Allí descubrirá el mundo paralelo que creó su padre, quien ha estado atrapado allí todos estos años.

Durante la primera hora de película el entretenimiento está asegurado. La introducción no se hace pesada y una vez dentro del mundo de Tron el ritmo es excelente. La participación de Sam en los juegos es una auténtica gozada. Duelos de discos y motos, estás escenas son pura diversión. La escena de las motos me ha encantado, sin duda alguna la pondría como candidata al mejor momento de acción del año 2010. En fin, esta primera mitad de cinta está muy bien llevada, no está nada mal para un director debutante.

Los efectos especiales están a un grandísimo nivel. Ojo al Jeff Bridges rejuvenecido. Vale, puede que tras los Na'Vi de Avatar o tras jugar a Uncharted no os sorprenda tanto, pero es innegable que se ha hecho un buen trabajo.

La estética es otra cosa muy buena de Tron Legacy, así como la ambientación. El diseño de los vehículos y de los trajes están bastante bien. Aparte de los FX, también se han esforzado mucho en este aspecto y la verdad es que se nota, está todo muy cuidado. Este film es sin dudarlo excelente para la vista.

La banda sonora electrónica ha sido creada por Daft Punk y le viene como anillo al dedo. Mejora aún más la ambientación.

Sin embargo, la vida no es color rosa. Tron Legacy dura dos horas no una. Y es en la 2ª mitad cuando viene lo malo. Justamente, cuando interviene el personaje mujer-florero de Olivia Wilde. En cuanto la ves ya sabes perfectamente cual va a ser su papel en la historia y como va a ser su relación respecto al protagonista. Este tipo de personajes no aportan nada a la trama y aquí no es una excepción. Además, le sobra un poco de metraje a la cinta.

(Sigo en el spoiler por falta de espacio)