1ª. Basada en la conocida novela de John Irving, el guion se ciñe con bastante fidelidad al texto literario lo que en algún momento ralentiza el ritmo
2ª. La realización muestra una paleta de personajes maravillosos en ese "Mundo solitario de los niños perdidos", con "Bebés huérfanos que no lloran porque saben que no sirve de nada"
3ª. Al frente de ese mundo está el Dr. Wilbur (Caine), un hombre bondadoso y caritativo que debe "Jugar a ser dios para no dejar todo al azar", que forma a su imagen su propia criatura, Homer Wells (Maguire), que deberá dar continuidad a su obra
4ª. La llegada de Candy (Theron), una bellísima mujer, despierta en Homer el ansia de libertad y la necesidad de ver mundo. Así llega a la Casa de la Sidra que también tiene sus normas ...
5ª. ... Y sus problemas que llevan a Homer a tomar arriesgadas decisiones para cerrar definitivamente el círculo en St. Cloud
6ª. Pulcra ambientación hasta en los más mínimos detalles, preciosos paisajes con una gama infinita de verdes que destacan en medio el rojo de las manzanas. Todo como marco para reflexionar sobre cuestiones como el aborto, incesto, infidelidad, toxicomanía, falsificaciones ... acaso demasiado superficialmente tratados
7ª. Excelsa interpretación de Caine, de lo mejor que conocemos de él. Bien Maguire, Theron y esos niños que son los "Príncipes de Maine y reyes de Nueva Inglaterra"
8ª y última norma. Cinta más que notable. No se la pierdan.