Ingenioso corto de Disney con su archipopular Mickey Mouse, que en apenas 7 minutos sintetiza un montón de buenas ideas y momentos hilarantes al servicio de una historia con mucho ritmo y que sorprende a cada segundo.

Desde el mismo inicio con la idílica casa de Mickey transformándose en caravana (y descubriendo que el enclave no es tan idílico como parecía a primera vista -es el vertedero municipal, de hecho-) comienza un viaje con Mickey y sus compañeros de fatigas: Goofy al volante y el pato Donald de invitado un poco vago.

A destacar las numerosas transformaciones que sufre la caravana, siendo este un aspecto muy llamativo, y la infinidad de gags rápidos y prácticamente todos acertados (muchos de ellos incluso brillantes) que hacen de este breve pero intenso corto toda una lección de humor visual sintetizado.

Gran trabajo de animación, que luce fantásticamente bien incluso más de 70 años después.