Un título poco habitual para una muy buena, y muy recomendada película procedente de Estonia, con destacadas actuaciones de un elenco para nada conocido pero que desempeñan muy bien a cada personaje. La historia se basa en la guerra entre una provincia Georgiana que busca independencia.
Un anciano cuya familia escapo de la guerra, salvara de morir a dos soldados, ambos enemigos. Sobrellevando las complicaciones, este hombre no desea abandonar su tierra ni su casa y deberá afrontar junto a su amigo, un cultivador de mandarinas, los rigores de la guerra. Por momentos dramática y tensa... esta simple y muy bien elaborada película se deja disfrutar y muy bien. Muy recomendada.