Muy cruda y malrollera. Hace mucho tiempo que no recuerdo haber sufrido tanto con una película. Es una película de torturas, sí, pero no es la típica "te torturo hasta que mueras o hasta que consigas huir". Martyrs va más allá. Se divide en distintas fases, que hace que sea mucho más amena, y hay una historia detrás que normalmente falta en las películas de este género.

Nada recomendable para aquellas personas reticentes a ver sangre, y machaque físico y psicológico. A mi me suele gustar la sangre y el gore, y con esta lo he pasado realmente mal.

Está muy bien hecha, y consigue que empatices con los personajes. Si vas a resistirlo, es recomendable que la veas. También os garantizo que no pienso volver a verla. No quiero volver a pasar por lo mismo, una y no más.