He aquí una de esas películas de acción que miran de soslayo el apartado más puramente comercial del género y que aunque aparentemente flirtean con ese tufo a adolescente universitario estadounidense embebido en hormona estúpida de fiesta, chiste facilón, torso desnudo y cuerpo 10, rápidamente nos damos cuenta de que se sitúa algo por encima de la media y de que la apariencia inicial no era para tanto. Como producto de entretenimiento funciona bastante bien y como hipérbole de nuestra puñetera dependencia de los teléfonos móviles, mejor todavía. Y es que efectivamente, "Cellular" es una oda a la telefonía móvil y a la enfermiza adicción que existe por ella, hasta el punto de depender nuestras vidas de los malditos móviles, en sentido completamente literal. Aquí se refleja como situación límite ficticia, pero ¿quién no ha dependido en un momento dado de un teléfono móvil para salir adelante? ¿Quién no se ha quedado tirado por culpa de no llevar uno encima? ¿Quién no ha tenido un problema por no haber contestado una llamada o no haber leído determinado mensaje de texto? ¿Quién, en definitiva, no se ha buscado un problema por algún tema relacionado con un teléfono móvil? Aunque solo sea por eso y con su expresión metafórica en la gran pantalla, esta película siempre estará a la moda.

Luego está la parte más puramente técnica de la peli. Ciertamente rinde con sentido y no se entrega al vicio de lo absurdo y disparatado, y tiene momentos que nos inyectan adrenalina y tensión en vena. De eso se encargan una Kim Basinger muy sufridora y un Statham al que no solemos estar acostumbrados a ver en un papel de malo cabronazo, liderando a una banda de corruptos policías secuestradores sin escrúpulos. Normalmente estamos acostumbrados a que Statham combata contra esos malos, y no que forme parte de ellos, así que podríamos decir generosamente que esta película es una especie de oda a lo inusual, rompedora de moldes y desencasilladora de actores y estereotipos. Y entre medias tenemos a un Chris Evans encargado de correr mucho de aquí para allá luchando contra el reloj, el pronóstico y el vaciado de la batería de su teléfono, urgido por la necesidad de mantenerse en línea en todo momento, cueste lo que cueste y caiga quien caiga y anteponiéndose a la adversidad, venga en forma de obras, atascos de tráficos, policías o abogaduchos de tres al cuarto.

Reconozco que el momento cumbre del joven huyendo de los que se lo quieren cepillar a ritmo de "Sinner Man" cuando nada de lo que ha ocurrido tiene ya ni solución ni marcha atrás, me hizo soltar un sincero y gustoso "¡¡Sí, señor!!", y por momentos como ese la peli tiene sus puntos positivos, aunque inevitablemente el final de todo cae en la previsibilidad más ramplona y ahí se pierde mucho del glamour de la historia. No obstante, el resultado global es bueno, proporciona diversión y te invita a ser algo menos dependiente y más pasota del móvil, aunque eso sí, no me ha molado demasiado ver a Statham rebajado a escoria a la que hay que machacar para salvar a "La Basinger". Está muy bien la señora en cuestión , pero no me gusta eso de tener que joder a un mito para salvar a otro.