Alguna carcajada puntual heredada de la buena época de Scary Movie y poco más. Estáis ante alguien que no duda en valorar las parodias derivadas del éxito de Scary Movie positivamente, pero lo de ésta es bastante insalvable.

No es que la película tenga problemas para mantener su humor, es más bien que entra en determinados chistes y actitudes que pertenece, gracias a dios, al siglo pasado. Un humor de cuñado, insensible y rozando lo censurable que no tiene en cuenta ni de dónde viene ni a dónde va y que no compensa cualquier gag que pueda hacer gracia, aunque sea desde la más absoluto brutalidad.

Como amante del humor absurdo, y de las películas más tontas existentes, mi consejo es que no os acerquéis a ella ni con un palo.