Regresando al universo Cloverfield en esta tercera película, al igual que la segunda, se trata de una historia derivada que cronológicamente se puede intuir que transcurre al mismo tiempo que la primera película. Aquí ya dan una pista sobre de donde han venido las criaturas vistas en las películas anteriores. Todo eso se remonta a un experimento espacial para resolver el problema de la energía en La Tierra, pero el resultado es algo que termina rompiendo las barreras del tiempo y espacio. La película es un thriller espacial donde vemos a los protagonistas enfrentándose a algo que solo es el comienzo de lo que sé fue viendo en la saga. El problema con esta película es que se trata de una historia que no convence mucho y requería de algo mucho más a pesar de la complejidad de su contexto. La película se siente floja y vaga, lo cual es una pena porque lo que se ve aquí es una pieza muy fundamental para conocer la verdad acerca de las criaturas de las demás películas. Todo lo que sé aquí es un conflicto relacionado con las realidades paralelas y las rupturas multidimensionales, pero no se aprovechó lo suficiente para hacer de esta película lo más importante de la saga como tendría que haber sido. The Cloverfield Paradox sirve como pista fundamental para el universo Cloverfield, pero como entrega de la saga es un tanto decepcionante. Mi calificación final para esta película es un 7/10.