Media votos
5,8
Votos
1.002
Críticas
85
Listas
23
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Manospondylus:
7
6,5
76
Serie de TV. Animación. Aventuras. Comedia. Drama
Serie de TV (2010). 12 episodios. La historia se sitúa en el futuro, donde la Tierra ha pasado por varias guerras, aunque en apariencia hay un poco de tranquilidad. Kanata Kumika es una chica de 15 años cumplirá su sueño y se enlista en el ejército, en donde su misión será proteger una fortaleza al lado de otras cinco chicas. Ahí, el único medio de distracción es el interpretar música en un mundo sin vida aparente... (FILMAFFINITTY)
17 de septiembre de 2016
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Entretenido anime de temática retrofuturista con un evidente mensaje antibelicista y aún ecologista, que sigue durante un año la vida de una chica en una compañía militar asentada en un paraje rural que a los conquenses resultará sorprendentemente familiar.
Mucha gente critica el excesivo parecido del diseño de los personajes con los de K-On! (los diseños originales de Mel Kishida eran diferentes aunque ya mostraban una estética moe), lo que en su día jugó muy en su contra. El estilo moe propició comentarios que la tachaban de "otro estúpido harem sin argumento" provenientes de personas que no se habían dignado a ver siquiera el primer episodio; y, claro está, las críticas negativas (casi siempre superficiales e infundadas) que se propagaron por Internet impidieron que alcanzara cierta notoriedad.
Evidentemente, So Ra No Wo To (o Sora no Woto, literalmente "Sonido del Cielo") no pertenece al género harem ("harén", género que consiste en que varias chicas jóvenes conviven y se sienten atraídas por un mismo chico, siendo Love Hina uno de los ejemplos más representativos y reconocibles) ni, afortunadamente, se le acerca. Por el contrario, esta serie se centra en la convivencia de un grupo de chicas que entablan unos fuertes lazos de amistad y compañerismo (entre ellas y con otros habitantes de Seize); y en la música y en la guerra, y en la música en tiempos de guerra y su posible efecto pacificador (la música entendida como un lenguaje común a todos los pueblos). Sin embargo, el conflicto bélico es solo el telón de fondo en el que se desarrolla la historia y no cobra importancia hasta los dos últimos episodios (el mejor arco argumental de toda la serie). Durante los otros diez episodios (y los dos OVAs) vemos el día a día del pelotón 1121 a través de pequeñas historias. Hay capítulos oscuros y dramáticos (a veces por medio de flashbacks) y otros más frívolos.
So Ra No Wo To se desarrolla en un hipotético futuro en el que la humanidad ha devastado gran parte del planeta. Las guerras, la contaminación y la sobreexplotación de los recursos naturales han dejado una vasta extensión de tierra (Nomansland) deshabitada, árida y estéril, que, como los desiertos reales, avanza año a año arrinconando a la humanidad. En una de las regiones todavía habitables, la trama sigue a Kanata quien, de niña y tras un primer encuentro con la guerra, quedó fuertemente impresionada por el sonido de una trompeta. Años después, Kanata (que tiene oído absoluto) decide ingresar en el ejército con el fin de aprender a tocar un instrumento y es enviada a la localidad de Seize para unirse al pelotón 1121, una pequeña compañía compuesta únicamente por mujeres jóvenes que vigilan ese remoto punto fronterizo mientras intentan reparar un antiguo tanque (el Takemikazuchi, una máquina bélica que, en lugar de las orugas de los tanques reales, se desplaza sobre seis patas articuladas y cuenta con un poderoso cañón).
El pelotón está liderado por la comandante Filicia, quien carga con una serie de traumas y miedos que oculta a sus subordinadas. Junto a ella están Rio, fuerte y modelo a seguir para las reclutas más jóvenes, Kureha, la más joven del grupo, y Noël, una genio que parece tener cierto gado de autismo de alto funcionamiento. Los personajes no parecen muy originales, de hecho es frecuente encontrar personajes similares (sobre todo en el caso de Kanata, típico personaje deredere) en el manganime, y es cierto que son unos personajes demasiado moekko para una obra con un trasfondo bélico, pero destacan las interacciones entre ellos: hay amistad, compañerismo y también cierta rivalidad y aún desconfianza, lo que crea situaciones que van desde la máxima relajación a las que sugieren una tensa calma.
Mención aparte merece el peculiar entorno en el que transcurre la historia y las gentes y culturas que por él desfilan. Lo primero que llamó la atención, en especial en España, fue su ambientación castellano-manchega. En realidad, So Ra No Wo To toma conceptos de muchos lugares y pueblos, principalmente europeos (España, Francia, Italia, Alemania, Suiza), pero también asiáticos (Japón, China, India). Así, tenemos una ciudad, Seize, idéntica al casco antiguo de Cuenca (no faltan las Casas Colgadas). También la Ciudad Encantada y la Torre del Campo de Alarcón aparecen durante la serie. Escuchamos idiomas como el Francés y el Alemán mezclados con costumbres japonesas. Podemos ver uniformes, armas y vehículos alemanes. Incluso la religión de Helvetia es una mezcla de cristianismo y sintoísmo.
Volviendo al tema de los parecidos de este anime con otras producciones de animación niponas, ya he manifestado lo mucho se destacó y criticó el parecido (muy superficial) de esta serie con K-On! (tampoco son las únicas slice of life con protagonistas femeninas, la música como eje y un diseño moe de los personajes; un buen ejemplo posterior a ambas es Hibike! Euphonium), pero en realidad So Ra No Wo To está mucho más próxima a Nausicaä del Valle del Viento (la genial película de Miyazaki que dio origen al Studio Ghibli). Las similitudes son evidentes: las protagonistas son chicas de una edad similar; ambos mundos muestran una Tierra contaminada y con grande áreas desiertas, con la población confinada en unos pequeños reinos en guerra, y en ambas historias se debe a una gran guerra en la que, además, se emplearon criaturas artificiales como armas (el Demonio/Ángel y los Dioses de la Guerra), y tras la cual se produjo un importante retroceso demográfico y tecnológico; e incluso parte de ambas historias siguen de una u otra forma alguna leyenda de sus respectivos mundos (las Doncellas de Fuego y la vieja leyenda del héroe "engalanado con sus lujosas ropas azules"). Sin embargo ahí acaban las semejanzas. Tanto la historia como los personajes de So Ra No Wo To gozan de identidad propia y, pese a parecer en conjunto una serie alegre, deja una huella aún más pesimista.
(Continúa sin spoilers)
Mucha gente critica el excesivo parecido del diseño de los personajes con los de K-On! (los diseños originales de Mel Kishida eran diferentes aunque ya mostraban una estética moe), lo que en su día jugó muy en su contra. El estilo moe propició comentarios que la tachaban de "otro estúpido harem sin argumento" provenientes de personas que no se habían dignado a ver siquiera el primer episodio; y, claro está, las críticas negativas (casi siempre superficiales e infundadas) que se propagaron por Internet impidieron que alcanzara cierta notoriedad.
Evidentemente, So Ra No Wo To (o Sora no Woto, literalmente "Sonido del Cielo") no pertenece al género harem ("harén", género que consiste en que varias chicas jóvenes conviven y se sienten atraídas por un mismo chico, siendo Love Hina uno de los ejemplos más representativos y reconocibles) ni, afortunadamente, se le acerca. Por el contrario, esta serie se centra en la convivencia de un grupo de chicas que entablan unos fuertes lazos de amistad y compañerismo (entre ellas y con otros habitantes de Seize); y en la música y en la guerra, y en la música en tiempos de guerra y su posible efecto pacificador (la música entendida como un lenguaje común a todos los pueblos). Sin embargo, el conflicto bélico es solo el telón de fondo en el que se desarrolla la historia y no cobra importancia hasta los dos últimos episodios (el mejor arco argumental de toda la serie). Durante los otros diez episodios (y los dos OVAs) vemos el día a día del pelotón 1121 a través de pequeñas historias. Hay capítulos oscuros y dramáticos (a veces por medio de flashbacks) y otros más frívolos.
So Ra No Wo To se desarrolla en un hipotético futuro en el que la humanidad ha devastado gran parte del planeta. Las guerras, la contaminación y la sobreexplotación de los recursos naturales han dejado una vasta extensión de tierra (Nomansland) deshabitada, árida y estéril, que, como los desiertos reales, avanza año a año arrinconando a la humanidad. En una de las regiones todavía habitables, la trama sigue a Kanata quien, de niña y tras un primer encuentro con la guerra, quedó fuertemente impresionada por el sonido de una trompeta. Años después, Kanata (que tiene oído absoluto) decide ingresar en el ejército con el fin de aprender a tocar un instrumento y es enviada a la localidad de Seize para unirse al pelotón 1121, una pequeña compañía compuesta únicamente por mujeres jóvenes que vigilan ese remoto punto fronterizo mientras intentan reparar un antiguo tanque (el Takemikazuchi, una máquina bélica que, en lugar de las orugas de los tanques reales, se desplaza sobre seis patas articuladas y cuenta con un poderoso cañón).
El pelotón está liderado por la comandante Filicia, quien carga con una serie de traumas y miedos que oculta a sus subordinadas. Junto a ella están Rio, fuerte y modelo a seguir para las reclutas más jóvenes, Kureha, la más joven del grupo, y Noël, una genio que parece tener cierto gado de autismo de alto funcionamiento. Los personajes no parecen muy originales, de hecho es frecuente encontrar personajes similares (sobre todo en el caso de Kanata, típico personaje deredere) en el manganime, y es cierto que son unos personajes demasiado moekko para una obra con un trasfondo bélico, pero destacan las interacciones entre ellos: hay amistad, compañerismo y también cierta rivalidad y aún desconfianza, lo que crea situaciones que van desde la máxima relajación a las que sugieren una tensa calma.
Mención aparte merece el peculiar entorno en el que transcurre la historia y las gentes y culturas que por él desfilan. Lo primero que llamó la atención, en especial en España, fue su ambientación castellano-manchega. En realidad, So Ra No Wo To toma conceptos de muchos lugares y pueblos, principalmente europeos (España, Francia, Italia, Alemania, Suiza), pero también asiáticos (Japón, China, India). Así, tenemos una ciudad, Seize, idéntica al casco antiguo de Cuenca (no faltan las Casas Colgadas). También la Ciudad Encantada y la Torre del Campo de Alarcón aparecen durante la serie. Escuchamos idiomas como el Francés y el Alemán mezclados con costumbres japonesas. Podemos ver uniformes, armas y vehículos alemanes. Incluso la religión de Helvetia es una mezcla de cristianismo y sintoísmo.
Volviendo al tema de los parecidos de este anime con otras producciones de animación niponas, ya he manifestado lo mucho se destacó y criticó el parecido (muy superficial) de esta serie con K-On! (tampoco son las únicas slice of life con protagonistas femeninas, la música como eje y un diseño moe de los personajes; un buen ejemplo posterior a ambas es Hibike! Euphonium), pero en realidad So Ra No Wo To está mucho más próxima a Nausicaä del Valle del Viento (la genial película de Miyazaki que dio origen al Studio Ghibli). Las similitudes son evidentes: las protagonistas son chicas de una edad similar; ambos mundos muestran una Tierra contaminada y con grande áreas desiertas, con la población confinada en unos pequeños reinos en guerra, y en ambas historias se debe a una gran guerra en la que, además, se emplearon criaturas artificiales como armas (el Demonio/Ángel y los Dioses de la Guerra), y tras la cual se produjo un importante retroceso demográfico y tecnológico; e incluso parte de ambas historias siguen de una u otra forma alguna leyenda de sus respectivos mundos (las Doncellas de Fuego y la vieja leyenda del héroe "engalanado con sus lujosas ropas azules"). Sin embargo ahí acaban las semejanzas. Tanto la historia como los personajes de So Ra No Wo To gozan de identidad propia y, pese a parecer en conjunto una serie alegre, deja una huella aún más pesimista.
(Continúa sin spoilers)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El dibujo es generalmente bueno (solo en el primer OVA baja algo el nivel), con unos fondos cargados de detalles, y la animación es casi siempre correcta (como es de esperar en un anime corto), ocasionalmente notable y un par de veces sobresaliente (claro está, durante los momentos importantes). La única pega es la abundancia de personajes estáticos en las escenas de grandes multitudes (en el mercado, por ejemplo).
Como no podía ser de otro modo en un anime en el que la música tiene un papel tan importante, la banda sonora es de lo más destacable de esta producción. Michiru Ōshida compuso una digna colección de temas entre los que destaca una bella canción, "Servante de Feu", que aparece como inserto en los episodios 1 y 12 durante el relato de la leyenda de las Doncellas de Fuego a las que alude el título de la canción, interpretada por Matthieu Ladouce y completamente en francés. El único tema que no ha sido compuesto para este anime es "New Britain" (melodía del himno "Amazing Grace"), la música que Kanata escuchara en su niñez y que tiene una gran importancia dentro de esta historia.
Cuenta además con un buen opening con una estupenda composición de la genial Kajiura, fuertemente influenciada por la música folklórica centroeuropea e interpretada, como no podía ser de otro modo, por Kalafina: "Hikari no Seritsu". Desde el episodio 2, acompañan a esta canción una serie de imágenes inspiradas en la obra del pintor austríaco Gustav Klimt (principalmente el Friso de Beethoven, pero también Peces Dorados, Hygieia y Tragödie) que se han utilizado para recrear el mito de las Doncellas de Fuego de la serie, pero con las chicas del pelotón 1121 en el lugar de las míticas doncellas. Además, el ending, "Girls, Be Ambitious", más corriente pero correcto, se ajusta bien a lo que cabría esperar de un personaje como Kanata y enfatiza los lazos de amistad existentes entre las protagonistas.
Para quien se quede con ganas de más, también hay dos OVAs. El primero, que transcurre ente los episodios 7 y 8, se centra en cómo Kanata descubre la principal fuente de ingresos de sus compañeras (la destilería clandestina) durante unas maniobras que parecen tomarse demasiado en serio después de que Filicia las emborrache accidentalmente (o no), y es más un montón de fanservice que otra cosa. El segundo OVA (o episodio 13) trata del siguiente Festival del Agua, en Seize, un año después de la llegada de Kanata y, aunque el argumento no es especialmente atractivo, revela varios detalles importantes tanto de algunos habitantes de Seize como del mundo en el que transcurre esta historia, y hace las veces de epílogo de la serie.
En definitiva, estamos ante un anime entretenido e interesante, que ha sido duramente criticado e injustamente menospreciado sólo por el diseño de sus personajes. Cuenta, en general, con un dibujo y una animación decentes, una ambientación muy cuidada que mezcla paisajes españoles con idiomas, objetos y costumbres de medio mundo; y una estupenda banda sonora. Deja un buen mensaje (pese a que el contexto de la serie parece algo pesimista) en contra de la guerra y a favor del cuidado de este planeta. Seguramente, su mayor fallo sea que, debido a su brevedad, el desenlace es algo brusco y apenas vemos nada de ese mundo más allá de Seize ni conocemos bien su historia, dejando con ganas de una continuación que es sumamente improbable que llegue.
Aspectos positivos: La idea en general. La ambientación, con esos paisajes castellano-manchegos y tantos elementos de medio mundo mezclados. La banda sonora y "Hikaru no Seritsu". Y, pese al pesimismo que aparece en ciertos momentos, el mensaje que transmite.
Aspectos negativos: Quedan algunas preguntas sin respuesta (hay mucho de ese mundo que desconocemos). Se dedica poco tiempo a algunos aspectos que deberían ser muy importantes y hay episodios centrados en historias que no aportan mucho. El diseño personajes excesivamente parecido al de K-On!
Puntuación: 7
Como no podía ser de otro modo en un anime en el que la música tiene un papel tan importante, la banda sonora es de lo más destacable de esta producción. Michiru Ōshida compuso una digna colección de temas entre los que destaca una bella canción, "Servante de Feu", que aparece como inserto en los episodios 1 y 12 durante el relato de la leyenda de las Doncellas de Fuego a las que alude el título de la canción, interpretada por Matthieu Ladouce y completamente en francés. El único tema que no ha sido compuesto para este anime es "New Britain" (melodía del himno "Amazing Grace"), la música que Kanata escuchara en su niñez y que tiene una gran importancia dentro de esta historia.
Cuenta además con un buen opening con una estupenda composición de la genial Kajiura, fuertemente influenciada por la música folklórica centroeuropea e interpretada, como no podía ser de otro modo, por Kalafina: "Hikari no Seritsu". Desde el episodio 2, acompañan a esta canción una serie de imágenes inspiradas en la obra del pintor austríaco Gustav Klimt (principalmente el Friso de Beethoven, pero también Peces Dorados, Hygieia y Tragödie) que se han utilizado para recrear el mito de las Doncellas de Fuego de la serie, pero con las chicas del pelotón 1121 en el lugar de las míticas doncellas. Además, el ending, "Girls, Be Ambitious", más corriente pero correcto, se ajusta bien a lo que cabría esperar de un personaje como Kanata y enfatiza los lazos de amistad existentes entre las protagonistas.
Para quien se quede con ganas de más, también hay dos OVAs. El primero, que transcurre ente los episodios 7 y 8, se centra en cómo Kanata descubre la principal fuente de ingresos de sus compañeras (la destilería clandestina) durante unas maniobras que parecen tomarse demasiado en serio después de que Filicia las emborrache accidentalmente (o no), y es más un montón de fanservice que otra cosa. El segundo OVA (o episodio 13) trata del siguiente Festival del Agua, en Seize, un año después de la llegada de Kanata y, aunque el argumento no es especialmente atractivo, revela varios detalles importantes tanto de algunos habitantes de Seize como del mundo en el que transcurre esta historia, y hace las veces de epílogo de la serie.
En definitiva, estamos ante un anime entretenido e interesante, que ha sido duramente criticado e injustamente menospreciado sólo por el diseño de sus personajes. Cuenta, en general, con un dibujo y una animación decentes, una ambientación muy cuidada que mezcla paisajes españoles con idiomas, objetos y costumbres de medio mundo; y una estupenda banda sonora. Deja un buen mensaje (pese a que el contexto de la serie parece algo pesimista) en contra de la guerra y a favor del cuidado de este planeta. Seguramente, su mayor fallo sea que, debido a su brevedad, el desenlace es algo brusco y apenas vemos nada de ese mundo más allá de Seize ni conocemos bien su historia, dejando con ganas de una continuación que es sumamente improbable que llegue.
Aspectos positivos: La idea en general. La ambientación, con esos paisajes castellano-manchegos y tantos elementos de medio mundo mezclados. La banda sonora y "Hikaru no Seritsu". Y, pese al pesimismo que aparece en ciertos momentos, el mensaje que transmite.
Aspectos negativos: Quedan algunas preguntas sin respuesta (hay mucho de ese mundo que desconocemos). Se dedica poco tiempo a algunos aspectos que deberían ser muy importantes y hay episodios centrados en historias que no aportan mucho. El diseño personajes excesivamente parecido al de K-On!
Puntuación: 7