Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Cinemaparadiso1951:
9
Cine negro. Thriller Frank McCloud (Humphrey Bogart) es un veterano de guerra que viaja a Cayo Largo, en Florida, para visitar al padre (Lionel Barrymore) y a la viuda (Lauren Bacall) de un compañero muerto en combate. Pero su estancia se complica, ya que en su hotel se aloja también una banda de gángsters que, aprovechando una fuerte tormenta, los toman como rehenes. (FILMAFFINITY)
21 de septiembre de 2021
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Al terminar la Segunda guerra mundial, un veterano del ejército llega al islote de Cayo Largo, en el Golfo de Méjico, para visitar al padre y a la viuda de un compañero muerto en combate. Pero su estancia se complica, ya que en el hotel se aloja también una banda de gangsters que, aprovechando una fuerte tormenta, los toman como rehenes.

Magnífico ejemplo de cómo unos cuantos personajes quedan atrapados en una situación límite, que permite sacar lo mejor y lo peor de cada uno de ellos: el valor, la cobardía, la amistad, la ambición, la soledad, el alcoholismo, la redención, el amor, el remordimiento, la crueldad o la traición. Aunque los diálogos son casi continuos (se basa en una obra teatral), el interés va “in crescendo” hasta el explosivo final.

De un excelente guion del posterior director Richard Brooks (al que se deben títulos tan memorables como "La gata sobre el tejado de zinc", "El fuego y la palabra" o "Los profesionales"), de la creación, por parte de John Huston, de una excelente atmósfera física y psicológica (con la presencia de un huracán devastador) y de un reparto irrepetible sólo podía salir una gran película, de esas que quedan para el recuerdo. Con un sensacional reparto : la pareja Humphrey Bogart – Lauren Bacall (matrimonio en la vida real, en la 4ª y última vez que aparecieron juntos en pantalla), además de secundarios de lujo como el gran Edward G. Robinson (impresionante como ganster), el inválido Lionel Barrymore (inválido en la vida real por una artrosis progresiva) o una magnífica y madura Claire Trevor (la chica de "La diligencia") como la amante alcohólica de Robinson, ganadora del Oscar en esta ocasión. Como en el mejor cine, los secundarios están a la altura o incluso superan a los protagonistas. Todo un festín.

Lo mejor.- La progresiva tensión de la trama, la claridad narrativa, el asfixiante clima que se respira, los diálogos punzantes e hirientes, las miradas y los silencios, la nitidez y expresividad de la fotografía en blanco y negro, y unas interpretaciones que rayan a gran altura, sin que nadie desentone.

Lo peor.- El origen teatral del filme no siempre está disimulado, aunque lo compensa constantemente la excelencia del trabajo actoral.

La frase.- “Si la cabeza dice una cosa y tu vida dice otra, la cabeza siempre pierde”.

El momento.- La primera aparición de Johnny Rocco (Edward G. Robinson): en la bañera y fumando un enorme puro. Una imagen que se clava en la retina del espectador y que define en un segundo el carácter chulesco y siniestro del personaje.
Cinemaparadiso1951
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow