Más allá de la trabajada puesta en escena, y que los primeros 30 minutos sirven para presentar tanto a la niña y su familia, como a los ex-convictos neonazis de manera dinámica, la historia es el refrito de siempre.

La dirección me pareció correcta, con una estética muy estilizada. Pero peca de un guion demasiado simplón y que al final, termina tomándote el pelo (spoilers). Las actuaciones me parecieron funcionales sin más. Joel McHale está en piloto automático, Amanda Brugel igual (se limita a mostrar miedo e indefensión), Lulu Wilson no transmite mucho más allá de una niña enojada, dado que nunca se dice más acerca del personaje. De hecho, me atrevo a decir que sientes más pena por los asaltantes nazis que por ella.

Tal vez sea Kevin James quien más comprometido parece con su papel. En esta web he visto tanto críticas que encumbran su actuación como gente que lo critica por forzarse a "hacer un papel serio" Opino que cumple profesionalmente, sin más. Reúne todas las características que debe mostrar su personaje y posiblemente sea el que más dimensión tiene.

La Banda sonora se limita a meter zumbidos estridentes para reflejar la "oscuridad" del relato, y es que la película debe ser bastante gore. De hecho, es la faceta que más cumple, siendo las ejecuciones bastante gráficas y relativamente trabajadas.

El problema de esta película es su Mcguffin, que nunca es explicado como bien dicen en las críticas. Sencillamente es un pretexto (vago y malo) para que la trama avance y todos los personajes estén es sus puestos.