Entretenida película de aventuras, con buenas actuaciones en el plano interpretativo (lógicamente el gorila hace lo que puede...) e impecable factura técnica. Se nota que está hecha con gran cariño hacia la obra original. Digno homenaje.

El gorila gigante, o la Octava Maravilla del Mundo como lo llaman en el film, es de un realismo como nunca antes se había visto en el cine, las escenas de acción son impresionantes, habiendo también momentos para la ternura, el amor y algún que otro chascarrillo o escena graciosa cuyo único fin es aliviar tensiones. Una película muy completa, rodada al estilo clásico pero con el acabado hiperrealista que nos permiten las herramientas actuales de infografía. Para disfrutar en familia. Puro espectáculo.

Como única pega comentar quizá su excesivo metraje: 3 horas y 7 minutos. Se hace notar sobre todo al principio; el viaje hasta la isla de la Calavera se dilata demasiado en el tiempo, y una vez allí, algunas de las escenas con dinosaurios se prolongan de forma innecesariamente artificiosa hasta límites insospechados. Salvando este detalle, se puede decir que estamos ante un trabajo francamente bueno de un director especializado ya en grandes superproducciones.