Haz click aquí para copiar la URL
Cuba Cuba · Guanabacoa
Voto de Kingo:
1
Serie de TV. Comedia. Drama Serie de TV (2006-2009). 3 temporadas. 773 episodios. Versión española (de gran éxito de audiencia) de la popular telenovela colombiana "Yo soy Betty la fea", que ha conocido diversas versiones en varios países con el mismo argumento. Beatriz Pérez Pinzón es una chica de 26 años poco agraciada pero muy inteligente, que entra a trabajar en la revista de tendencias "Bulevar 21". Allí se enamorará de su jefe, Álvaro Aguilar, el joven y ... [+]
20 de agosto de 2007
100 de 127 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si Hans Christian Andersen levantase la cabeza, y pudiese ver en qué se ha convertido su cuento del patito feo, lo más probable es que se plantase -recortada en mano- en los estudios de Telahinco y acabase en Alcalá-Meco, muy tranquilo él sabiendo que los videos de la serie no solo serían una prueba exculpatoria, sino una demostración de que existían motivos poderosos y de ineludible obligación moral.

Sobre las interpretaciones no diré nada, porque ni las hay: se trata de actorzuelos pésimos dando vida a personajes inverosímiles, que nada tienen que envidiar a los que parodiaban en los culebrones de Joey Tribbiani, de los que se cachondeaba la serie Friends.
Además, hay varios aspectos a destacar que hacen de este esperpento algo aún más odioso de lo que a simple vista parece:

-Por un lado, se intenta lanzar el mensaje de que la belleza ha de ser interior, y que la cáscara que nos ha tocado no es algo sino superfluo y sin importancia... pero, al mismo tiempo, el tipo por el que varias de las señoras suspiran parece recién salido de un anuncio de yogures.

-El hecho de que salga Fedra Lorente es antitético en si mismo: esa señora se hizo famosísima, fué un sex-symbol nacional, haciendo el papel de "La Bombi" en el "Un, dos, tres", que no era sino una tia buena con el cerebro de un berberecho. Ahora la vemos en una serie que se supone aboga porque la belleza exterior no es importante, con su magro talento, y un deterioro físico sobrecogedor. Ni Kafka hubiese imaginado algo tan extrañísimo.

Conclusiones: que habré visto cuatro o cinco episodios y ya no más, porque aprendí la valiosa lección de comprobar que el mando de la tele esté al alcance de la mano cuando me tumbo en el sofá; que con eso ya tuve suficiente como para saber que hay varios personajes soberanamente irritantes, y que si que es insoportable la voz nasal de la prota; que la imaginación de los creadores de series nacionales simplemente no existe, igual que su verguenza... y que si esta porquería es líder de audiencia, comienzo a comprender a qué se refieren los franceses cuando dicen que África comienza tras los Pirineos.

Tan recomendable como colocarte las lentillas llevando puesto el guante de Freddy Krueger.
Kingo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow