Tras un ataque sorpresa con drones, el agente Mike Banning es acusado de un intento de asesinato del presidente de los Estados Unidos. Perseguido por su propia agencia y por el FBI, Banning inicia una carrera a contrarreloj en la que ha de desvelar al auténtico grupo terrorista que ha puesto su mirada sobre el presidente.


Una tercera parte llega a las salas de cines, con una expectativa baja de mi parte, porque las dos anteriores habían sido muy entretenidas pero nada relevantes. La serie ha recibido una recepción crítica generalmente mixta y con tres películas lanzadas hasta la fecha (dicen que es la última, pero veremos), la serie Has Fallen (Ataque A La Casa Blanca, Londres Bajo Fuego y este estreno) ha recaudado $ 477 millones en todo el mundo, siendo comercialmente exitosos.


Presidente Bajo Fuego sigue manteniendo el nivel de las entregas anteriores con el mismo entretenimiento de siempre.


La dirección, en este caso, corre a cargo de Ric Roman Waugh y no hace un mal trabajo. Logra crear buenas escenas de acción. Y concreta, en mi opinión, un buen manejo de efectos especiales, cosa que en las anteriores no pasaba. Los efectos no eran nada buenos, muy falsos y le quitaban realismo, aquí mejoraron y mucho, mezclando los prácticos y hechos por computadora. Tengo que admitir que, aunque la trama es muy predecible, logra crear tensión, sobre todo en la parte final.

Como dije, el guion del propio Waugh, Matt Cook y Robert Mark Kamen -el escribió tres de las cuatro entregas de Karate Kid- (basado en un argumento de Katrin Benedikt y Creighton Rothenberger) es muy predecible, es básicamente una copia de El Fugitivo (1993) un peliculón protagonizado por Harrison Ford y Tommy Lee Jones, con muchos elementos parecidos. Pero el director, sabiendo de eso (en complicidad con los actores), lo llevan lo más entretenido posible, sanando la herida y no considerarlo como un error de los grandes.

Gerard Butler da una nueva muestra de que no solo se vuelve a destacarse como un patea traseros sino también es un actor muy carismático que sabe llevar la película adelante, sea el guion que se le aparezca.

Morgan Freeman como el presidente Allan Trumbull, aunque aparece muy poco, cumple con su rol.

Pero mi personaje favorito fue el gran Nick Nolte como Clay Banning. Me termino sacando muchas risas, siendo el más desarrollado.

En lo respecto a fotografía y escenarios, la película está conseguida.


Pero si tengo breves quejitas:
Me pareció un poco raro e inesperado que reemplazaran a Radha Mitchell por Piper Perabo como Leah Banning, la mujer del protagonista. Como que ya me había acostumbrado a la primera, pero igual Piper (aunque no se parece a la anterior) hace un trabajo muy correcto.

Pero lo que si no le puedo perdonar a la escritura son los giros inesperados, fueron más que obvios y si me provoco un poco de molestia.


En sí, mucho no hay para analizar. Presidente Bajo Fuego cumple como un entretenimiento garantizado, se nota que la pasaron bien haciéndola como pasar un rato entre amigos. Se encontraran con una historia muy simple y predecible pero con buenas escenas de acción que te van llevando por buen puerto, es un estreno que vamos a disfrutar si dejamos el ojo crítico a un lado. Yo la disfrute mucho y me dejo un buen sabor de boca.

Nota: 5/10
Amarillo, Pulgar Arriba.