Cuando hablamos del Doctor sabemos de quién estamos hablando. Doctor Who representó un gran avance en las series de Ciencia-Ficción de la historia, presentando grandes actores interpretando grandes papeles en grandes situaciones.
Este remake no es sino la adaptación fiel de dicha serie (con muchos tributos a los antiguos protagonistas) a los tiempos modernos.
Necesitamos conocer la desgracia del Doctor, que es el único de su especie y que tras 900 años sigue viajando buscando sentido a una vida de aparente soledad. Esta soledad se ve paliada por la presencia de sus acompañantes de viajes, que animan y hacen al queridísimo Doctor una compañía necesitada.

En cuanto a los actores debo decir que al principio la falta de presupuesto de la serie me echaba para atrás, con efecto especiales escasos y con gente disfrazada, pero lo que te cautiva no son las luces. Si no eres capaz de ver más allá de luces y efectos "Lucas" nunca apreciarás una serie magnífica como esta. Lo que me cautivó fue las interpretaciones de los varios doctores que ha habido. Descubrimos a un Christopher Eccleston divertidísimo y alegre o a un David Tennant simplemente brillante y sorprendente o a un magnífico Matt Smith (el actual Doctor) que nos cautiva con su excentricismo. Todos diferentes pero todos nos transmiten quien es el Doctor esencial.

Una serie que tiene de todo, desde rigor científico hasta drama, con comedia, romance, aventuras, ciencia-ficción.... Una vez vista esta serie te darás cuenta de dos cosas:
1- Odias a los Daleks con todo tu ser.
2- Lo darías todo, cualquier cosa, por acompañar a alguien como el Doctor en sus viajes.