La cara de los actores es para rompérsela a todos, esto está muy logrado. Juana no deja lugar a dudas, está más sonada que Rocky Marciano en su último combate. Viendo a tanto hijo de puta me pongo enfermo, esta no ha sido una excepción, otro mérito. Hay que valorar que la historia se centre en el juicio de la "Santa" Inquisición, en este obispo cabrón y sus secuaces, un brazo armado más al servicio de la corona británica, en lugar de repasar los albores de su visionismo, sus hazañas bélicas (eh eh eh me gusta esa chica!!!), y demás correrías.
La primera parte es bastante inquietante, cargada de primeros planos que nos obligan a odiar y sufrir claustrofóbicamente. Los "exteriores" son muy meritorios, las danzas y alardes de los circenses, el pueblo, la lucha, la hoguera, intercalando planos, me ha gustado y no daba un duro por ello.
Resulta muy difícil poner nota a este tipo de cintas añejas. Yo, por los huevos que tiene la historia retratando a esta banda de asesinos de sotana y hábitos varios, y por unos últimos 20 minutos muy entretenidos, llenos de acción, le planto un 7.