...No había vuelto a ver esta magnífica película desde su estreno, hoy me ha parecido más grande que entonces, cuando la menosprecié por parecer parida del vientre de HAPPINESS, de Todd Solonz.
La mitad del trabajo lo hace una onírica y envolvente música incidental, asaltada de vez en cuando por un puñado de grandes clásicos del rock de los WHO y compañía. La otra mitad sin duda, es el grandioso trabajo de todos los actores, TODOS. Qué grande Kevin, mi admirado Chris Cooper, Annette, la deseada Mena, que cumple con creces el papel. Supongo que además del talento innato de éstos hay un gran trabajo de dirección de los personajes. Podría sacarle alguna pega al friki de las grabaciones, a veces parece que está a punto de partirse la polla. Sam Mendes , que debutaba por aquel entonces, pone todo de su parte y consigue secuencias memorables, meticuloso y elegante, sutil y poderoso, dota a la historia de la fuerza visual que necesita para formar en conjunto una peli de 10. Es maravilloso ver a Mena Suvari tumbada en la cama, desnuda, mostrándose sincera y relajada por primera vez... genial.

Nada más, este es mi granito de arena, sigo brindando por pelis así.