De momento llevo 7 películas de este gran actor, que me estoy alimentando mucho de su cine porque hay talento en el cine argentino pero últimamente me estoy llevando decepciones, como con esta al igual que me pasara con Kamchatka hace unos días. Hay que decir que la idea era para hacer una gran obra imprescindible pero se queda en un intento, una cinta vacía y sin sentimientos. Hasta en los momentos más interesantes e intrigantes se queda en unos intentos y eso es culpa de la narración y el guión donde Trapero no da todo lo que debería y no explota su potencial, es una verdadera lástima que no haya ni denuncia social ni dramatismo ni lágrimas ni sorpresas en un guión que no salva un par de escenas buenas de fuego cruzado. Un romance tópico, un ritmo irregular y una historia realmente desaprovechada y tediosa, ni siquiera Ricardo Darín salva la cinta pese a sus minutos de metraje que queda en un segundo plano a causa de los flojos Renier y Gusman. Una decepcionante trama y película que el tiempo la pondrá donde se merece aunque ya no haya sido suficientemente reconocida, no pasará a la gloria en la filmografía de cualquiera de los actores. Ni siquiera la canción principal encaja con el tono dramático y serio de la cinta pareciendo una comedia con esa estúpida canción. Regular.