Sin duda una comedia gamberra con Ben Stiller (desternillante en Tropic Thunder y divertido en Noche en el museo y Los padres de ella), Jonah Hill (Supersalidos e Infiltrados en clase, con eso lo digo todo) y Vince Vaughn (Aceptable en Cuestión de pelotas y Starsky y Hutch) prometía ser algo mas que un mero entretenimiento lleno de tacos y agujeros de guión repitiendo la misma fórmula de siempre. Verles en cartel era un sinónimo de buena película pero ha ocurrido todo lo contrario. Una película vacía, sin clichés divertidos a excepción de momentos divertidos contados con los dedos de la mano de Jonah Hill y Vince Vaughn, con un final insulso, giros de guión asquerosamente provocados, escenas prescindibles, duración excesiva, vergüenza ajena en algunas escenas, previsibilidad en cada escena que ocurre y personajes metidos con calzador y prescindibles. No hay mucho que resumir, puede parecer un spoiler pero inventar que para matar a los extraterrestres hay que romperles los huevos directamente es para haberselo inventado cualquier niñato de tres al cuarto que ve películas de American Pie y las considera peliculones. Momentos surrealistas como el momento de las fotos con el extraterrestre (¿Dónde estaba la familia de Vince Vaughn?), si Ben Stiller es esteril ¿de donde sacan esa niña al final si no dicen que la han adoptado?. Hay que reconocer que la película tiene acción pero de pasar de un extremo a otro bromeando y metiendo tacos y tetas con calzador como lo de la orgía esa que no se lo cree nadie pero en parte era previsible es algo demasiado insulso pese a ser una comedia. La película empieza como una comedia para todos los públicos pero acaba siendo un despiporre lleno de tacos y frases tan oídas que ya cansan y momentos previsibles y mal ejecutados. En fín, una comedia para acabar el año viendo que Fox ha realizado un año muy flojito con tostones como El canguro o El gran año o decepciones como Abraham Lincoln cazador de vampiros o Prometheus. Buen reparto pero mal guión y eso ensucia la película.