Magnífica serie histórica, al nivel (quizá sea un poco blasfemia) de Yo, Claudio. No solo te engancha, si no que además instruye, y sirve como acercamiento a la historia de Roma para los neofitos, y al vez fascinarlos con su estudio. Además, es de esas series que apetece revisar, ya que son tantos los detalles de cada episodio, que en varias revisiones gana puntos. Aunque trata un periodo ya tratado en algunas producciones de cine hollywoodense o peplum, no volverás a verlos igual, ya que se podría considerar la plasmación "definitiva" de tales acontecimientos. La ambientación esta muy bien documentada, con los últimos hallazgos arqueológicos puestos en práctica, como la profusión de pintadas por las paredes, la suciedad de la propia ciudad, los colores cargantes que utilizaban los romanos en las estatuas y edificaciones (las columnas de ciertos edificios como el de el senado eran rojas hasta la mitad, y eso algo muy novedoso en el concepto que tenemos de películas de romanos).
El casting de actores es bastante acertado (quizá haya alguna pega respecto a la edad de ciertos personajes), cumpliendo cada uno y haciendolo creible, empezando por los dos protagonistas, en los que más licencias se toma (y eso que estan extraidos de Las Guerras de las Galias de Julio César, siendo los únicos legionarios a los que nombra por el nombre).
Se toma alguna licencia, y bien es cierto que alguna escena peca del menor presupuesto que una película de cine, pero lo suple con ingenio y buen hacer, y una buena espectacularidad contenida.
Intrigas, luchas por el poder, traiciones, personajes sólidos... todo eso es Roma y más.

(Únicamente el doblaje del senador Catón, que por no se sabe muy que razones, tiene un fuerte y marcado acento ruso, y el tipo realmente ni siquiera era extranjero).