No pasará a la historia por ser la mejor película, eso es cierto, pero aún siendo floja y en ocasiones ridícula, Flash Gordon tiene cierto encanto visual, consiguiendo un universo "camp" muy parecido al de la mítica serie televisiva Batman, (con un Adam West totalmente hilarante).
Esa lucha por intentar desbancar la (en mi modesta y humilde opinión), sobrevalorada y cansina saga de La guerra de las galaxias, no deja de tener su mérito, aunque lo único que consiga sean más sonrisas que aplausos.
Lo mejor, el reparto encabezado por el siempre digno Max Von Sydow, (que seguramente se metió en la producción por el salario), y por la bella y escultural Ornella Muti, una rival de peso comparada con la sosa Melody Anderson, (Dale Arden), por conseguir el amor del también soseras Sam J. Jones, (Flash Gordon).
Respecto a la banda sonora, el grupo musical Queen ofrece una melodía digna, aunque muy alejada de sus mejores trabajos.