Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Un poquito pesada:
7
Drama Coco ha trabajado toda su vida en una estación de servicio, pero cuando ésta se vende, se queda sin trabajo. Desocupado y sin muchas expectativas, sobrevive intentando vender cuchillos artesanales que él mismo fabrica. Un excelente perro dogo de pura raza acabará convirtiéndose no sólo en su amigo, sino en la única esperanza de una vida mejor... (FILMAFFINITY)
29 de abril de 2010
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
En una hilarante escena, los reunidos averiguan que LeChien es una trampa para francófonos, el verdadero nombre del perro es Bombón, lo que al fin les explica la incomprensible inapetencia de tan magnífico ejemplar. Pero, ay, no van por ahí tampoco los tiros, al final resultará que de lo que renegaba era de las obligaciones, los pedigríes y los oropeles, así que se escapa, como Malacara, a la búsqueda de un lugar que encontrará acomodado en los cuartos de atrás de una sin nombre como su dueño.
De modo que con este Sorín nos pasamos la vida buscando al perro que se escapó, siempre recorriendo esos paisajes mínimos con sus horizontales y sus polvos, tan a propósito puestos allí que nos llega a parecer sencillo fotografiar y poner ritmo a la película.
Y cuando ya tenemos los mimbres, la carretera, la calma y la lontananza, sólo necesitábamos unos pocos personajes trazados a la perfección. El protagonista esquemático pero de profunda amargura que se aferra a sus cuchillos como su impronta única y verdadera: no conseguirá venderlos, pero se los ofrecerá de corazón a la cantante en uno de los momentos más conmovedores de la película.
Y aunque también vemos asomar levemente el brillito de la ambición, nos quedamos tranquilos cuando comprobamos que los golpes de la natural caída no lo dejan muerto, éste Villegas es tan artista de la resignación como todos sus compañeros, empezando por el cuidador, cuyo intérprete despliega un arsenal de recursos y nos convence más que nadie de un difícil papel totalmente contrastado con el del protagonista.
Ejercicio arriesgado después de Historias Mínimas, no hace añorar a aquélla ni tampoco satisfará a los detractores de las “lentas”, tan llenos ellos de ritmo…
Un poquito pesada
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?

Últimas películas visitadas
The Enemies
1968
Hugo Claus
arrow