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Voto de Romero:
8
9 de enero de 2024
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
A la crítica profesional se le ha indigestado, vaya por Dios. No habrán cobrado lo suficiente esta vez. Luego se desviven en elogiar bodrios como Indiana 5 o las infumables Star Wars de Disney.
La película no es perfecta, pero sí hermosa y divertida y sincera en lo que plantea. La mayoría de personajes refulge ante nuestra mirada, colmada de mimo estético, gracias a unos actores estrella que van apareciendo como una batería de cañones dorados (me encantó la ridícula pareja de Michael Shannon y Mike Meyers). La cinta adolece de un montaje algo repetitivo, sobre todo alcanzado el último tercio del metraje, y el desenlace, por desgracia, podría ser un buen ejemplo del pecado de contar en vez de mostrar (¿hasta qué punto tiene de esto la culpa el propio público que acude en masa a ver refritos escritos por y para idiotas?), pero ni siquiera eso nos impide seguir gozando del baile, que luce compás de amalgama y deliciosas formas de art déco que nos interpelan en sus cuestiones de fondo: el arte, el amor, la amistad, la valentía, la libertad, la guerra, la política. "Ámsterdam" podría ser el París de Bogart, un refugio emocional que David O. Russell ha intentado compartir con todos. Yo solo puedo agradecerlo.
La película no es perfecta, pero sí hermosa y divertida y sincera en lo que plantea. La mayoría de personajes refulge ante nuestra mirada, colmada de mimo estético, gracias a unos actores estrella que van apareciendo como una batería de cañones dorados (me encantó la ridícula pareja de Michael Shannon y Mike Meyers). La cinta adolece de un montaje algo repetitivo, sobre todo alcanzado el último tercio del metraje, y el desenlace, por desgracia, podría ser un buen ejemplo del pecado de contar en vez de mostrar (¿hasta qué punto tiene de esto la culpa el propio público que acude en masa a ver refritos escritos por y para idiotas?), pero ni siquiera eso nos impide seguir gozando del baile, que luce compás de amalgama y deliciosas formas de art déco que nos interpelan en sus cuestiones de fondo: el arte, el amor, la amistad, la valentía, la libertad, la guerra, la política. "Ámsterdam" podría ser el París de Bogart, un refugio emocional que David O. Russell ha intentado compartir con todos. Yo solo puedo agradecerlo.