Caída en picado de la saga en esta quinta e, imagino, última entrega. Ya se venían notando síntomas de agotamiento en la anterior, pero aquí realmente se cae con todo el equipo. La peli a pesar de ser más o menos, igual de corta que las anteriores se hace larga. Hay un montón de cosas sin ton ni son (entiendo que es una peli para niños, pero aquí abusan en exceso de las tonterías) y, además, recuperan un personaje que había funcionado perfectamente en entregas anteriores y lo destrozan de tal forma que no funciona en absoluto y pierde toda su gracia.
Mención especial para los "momentos ardilla" que aquí acaban tocando el techo de las absurdeces. Lo que empezó como un buen recurso, innovador y divertido ha acabado por ser algo que causa desidia y pereza máximas.
Lo salvable de la cinta es lo de siempre, los momentos cómicos (e irónicos en el caso de Manny) de los protagonistas y algún momentazo muy divertido entre el padre de la mamut y el novio. Por lo demás, muy olvidable.