Una película interesante con unas actuaciones bastante solventes aunque no me lleguen a emocionar, con una dirección respetable aunque quizás con demasiados tiempos muertos y falta de ritmo en los diálogos. La película tiene una banda sonora muy solvente de gran calidad, que quizás sea lo mejor de la película.

Lo que sí es un fallo garrafal que hace perder toda credibilidad y no permite trasladarse a esa época y lugar es la calidad de la producción. Falta atrezzo, las paredes tanto de dentro como fuera del recinto están limpios como patenas, las camas recién construidas con maderas nuevas, sin manchas, sin escritos. Las ropas de los prisioneros están prácticamente recién salidos de la lavadora. La pieles de los prisioneros están impolutos, como recién duchados a diario, buenos zapatos, ninguno descalzo, todo está increíblemente nuevo, recién traído de la carpintería para montar un escenario, las lamparas no tienen polvo, las mesas tienen lo justo y necesario aparte de limpias, los coches encerados, y la piedra de las paredes externas son tan perfectas y limpias que parecen un escenario de cartón piedra.

La falta de credibilidad del escenario hace inútil el esfuerzo de los actores por hacernos creer que estamos allí.