Mel Gibson es un delincuente americano que va a parar a una cárcel mexicana que parece un centro comercial, y en dónde las familias de los presos pueden vivir con ellos (un poco como en 'Sona', la cárcel panameña que nos mostraron en la ya olvidada 'Prison Break'). Por cosas que no vienen al cuento, se hará amigo de un niño y de su madre, y como buen héroe americano intentará salvarles de unos delincuentes que quieren el hígado del niño para venderlo en el mercado negro.

Ya veis que la cinta no es que sea de lo más original, más bien todo lo contrario. Y si bien es entretenida, no deja de ser un producto 100% de videoclub, de esos que si no fuera por Gibson jamás verías. Su falta de presupuesto es alarmante, y se nota mucho en las escenas de acción.

Mel Gibson jamás volverá al altar del que los judíos le bajaron con subproductos así, que para más inri ni se estrenan en los cines. Aunque al ser fan incondicional de él, espero equivocarme.

Lo mejor: Su falta de pretensiones y que entretiene.
Lo peor: Es un producto 100% de videoclub.

@Chackson5