Hace unos cuantos años, tal vez 7 u 8, recuerdo un día que mi padre estaba viendo una película y yo contemplé un par de escenas. Hubo una frase que, no sé porqué, se me quedó especialmente grabada en mi memoria y que pensaba que nunca iba a encontrar. Esa frase es la del título de mi crítica: `Alguien ha estado cambiando los carteles´, decía un miembro de la pareja protagonista dentro de su coche mientras contemplaban esas señales de tráfico que informan de los kilómetros que hay hasta la ciudad anunciada. Cuando la película llevaba unos 20 minutos, me lo veía venir, tenía toda la pinta, y así fue!!! La encontré!!!
Por ese simple hecho ya me alegré de estar viéndola, pero si no me hubiera gustado no le hubiera otorgado el 8. Y es que la película me sorprendió gratamente, se trata de una Road Movie, un subgénero que me gusta mucho. Los escenarios y recursos (solitarias carreteras, mastodónticas extensiones de maizales laberínticos, pueblos fantasma, niños malvados...) son muy acertados y me agradaron. Cabe citar la sublevación de Malakhai (el ejecutor) hacia Isaac (la palabra), cojonudo, ya que Malakhai era realmente perturbador e Isaac, el caudillo, con sus miradas malignas... Pues eso, todo muy bien, pero tenían que cagarla al final. Los 15 minutos finales son bochornosos, ¿por qué estropear de esa manera esta entrañable película? En fin... una pena. Aún así no quería darle tan solo un 7 y le inflé la nota hasta el 8, jé.