Excelente película de terror Argentina, muy bien llevada adelante tanto por el director Demián Rugna, como por Maxi Ghione con una actuación que esta a la altura.
Cada secuencia del filme esta realizada de manera detallada y precisa, se nota el detalle en cada escena para que genere mas miedo o suspenso y a la vista está que no se necesita mucho presupuesto sino ideas.
El género es casi lo único que esta salvando al cine argentino.