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Voto de Ferdydurke:
4
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Drama
Situada en 1936, Don Gregorio enseñará a Moncho con dedicación y paciencia toda su sabiduría en cuanto a los conocimientos, la literatura, la naturaleza, y hasta las mujeres. Pero el trasfondo de la amenaza política subsistirá siempre, especialmente cuando Don Gregorio es atacado por ser considerado un enemigo del régimen fascista. Así se irá abriendo entre estos dos amigos una brecha, traída por la fuerza del contexto que los rodea. (FILMAFFINITY) [+]
29 de enero de 2022
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
El traje de Tarzán suena.
Ternurismo pedestre y didactismo tosco para una fábula simple, bonita, obvia, delicada, esmerada, artificiosa, maniquea. El chaval es un pimpollo que lo hace muy bien y el maestro Gómez siempre lo borda, aunque aquí remarca excesivamente la bondad de un personaje imposible, un ángel en la tierra.
La historia de la mujer perruna es un fiasco, una tonta jodienda zoofílica, cuernos caninos mediante.
La de la china gallega es bonita cuando suena el saxo como en El sur de Erice, ese retruécano sostenido infinito. Los lobos y la mudita y el ogro.
La principal entre el abuelo y el chaval y la familia del sastre está muy cogida por los pelos con el telón de fondo eterno de la república bucólica, el bosque animado, y el golpe tremebundo y los curas malos y la falange de aquella manera y los rojos más santos y todo eso mirado tan (de) nuevo, claro, por supuesto.
Ternurismo pedestre y didactismo tosco para una fábula simple, bonita, obvia, delicada, esmerada, artificiosa, maniquea. El chaval es un pimpollo que lo hace muy bien y el maestro Gómez siempre lo borda, aunque aquí remarca excesivamente la bondad de un personaje imposible, un ángel en la tierra.
La historia de la mujer perruna es un fiasco, una tonta jodienda zoofílica, cuernos caninos mediante.
La de la china gallega es bonita cuando suena el saxo como en El sur de Erice, ese retruécano sostenido infinito. Los lobos y la mudita y el ogro.
La principal entre el abuelo y el chaval y la familia del sastre está muy cogida por los pelos con el telón de fondo eterno de la república bucólica, el bosque animado, y el golpe tremebundo y los curas malos y la falange de aquella manera y los rojos más santos y todo eso mirado tan (de) nuevo, claro, por supuesto.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Lo mejor es la reflexión sobre el peligro de los conversos que siempre exageran el gesto, excusatio non petita, accusatio manifesta, o de los que fingen ser lo que nunca fueron para no quedarse atrás en el carrusel monstruoso de la historia, esa gran farsa, gira la rueda, vamos, el pan nuestro de cada día o de cómo milagrosamente una vez muerto Franco, por ejemplo, ya nadie en verdad era o había sido franquista, todos perennes democráticos que vivieron poco menos que como los maquis, escondidos y perseguidos, y sus padres lo mismo, seguro, pues de eso siempre mucho, el ademán forzado del que en verdad no cree en nada y que, por lo tanto, demuestra en todas las ocasiones la máxima fe sobre/en todo lo que acontece o toca en cada momento, a toque de pito, se apunta, tira la primera y la última piedra, cambia constantemente para mantenerse en el mismo punto oportunista y sin escrúpulos continuamente, sin moverse en verdad nunca de su sitio.
¡Desierta cama, y turbio espejo y corazón vacío!, parece una canción de Willy DeVille, ese clásico español de las letras, ancha es castilla.
La música es pegadiza y también cargante.
¡Desierta cama, y turbio espejo y corazón vacío!, parece una canción de Willy DeVille, ese clásico español de las letras, ancha es castilla.
La música es pegadiza y también cargante.