Papi.
Comedia de terror psicoanalítico que trasciende las reglas del género tonto para hacer una inmersión a libre pulmón patafísica en la genealogía de la moral y la mente a través de escarpados zarpados tirabuzones procesos cognitivos gnoseológicos en los que los científicos cinematográficos (se la) pelan las capas de la nana de la cebolla del cerebro perturbado del asesino susodicho o matarife redomado que en su infancia o infinita misericordia padeció tormentos innombrables y que en su madurez o descalzaperros no tan cachondo los perpetró igualmente a diestro y siniestro y a mansalva creando a su paso estupor y desconcierto a la par que dejando una indeleble estela de horror sin parangón ni conocimiento.
Genial.
Es la que menos miedo da. Y la que menos risas ofrece. ¿Qué trae o tiene?
Dios dirá.
Cosas a destacar.