Interesante cinta si consideramos su fecha de producción, y que cuenta con un protagonista juvenil, muy en boga durante los años 80. Notables efectos visuales que le dan cierta espectacularidad a esta película. Interpretaciones acertadas, con un Chris Sarandon en cabeza de cartel y que da a su personaje una mezcla de vampiro y libertino. Además, cuenta con un cuidador, no vampiro, que hace las veces de su Asistente Personal. El fallecido Roddy McDowall hace de caza vampiros para la Televisión, y que no termina de creerse el cuento de los no muertos, hasta que lo vive en carne propia. Amanda Bearse muy atractiva cuando es "poseída" por la maldición del vampirismo.-