Acabo de ver este cacareado clásico del cine adolescente, o incluso de todo cine de los 80 como bien predican muchos medios. Tenía muchísimas ganas: la banda sonora, la estética, las ganas de nostalgia, y la prometedora premisa de 5 chavales castigados/encerrados durante demasiadas horas en el insti. La cosa empieza bien y resulta bastante verosímil y entrañable: los cinco intentan zafarse como pueden, con los pocos medios de los que disponen, del yugo de la autoridad encarnada por el típico director tirano, muy bueno en su papel. Los chicos también hacen papelones, aunque totalmente estereotipados: el empollón, la rarita marginada, la guapa, el deportista y el macarra. Ese macarra, Bender, que brilla con luz propia, que lo borda, que lo peta. Y que sin él, la peli perdería parte de su (poca) gracia.

Sé que existe una serie, anterior a esta película, y supongo que argumentalmente tendrá más sentido. Un club necesita varias sesiones, necesita una evolución temporal mayor para que de ahí salgan consecuencias naturales. No puede consolidarse en la primera sesión, que es la que abarca esta película. La peli deja con un sabor amargo, una sensación de incredulidad ante el desarrollo de las relaciones entre ellos, y el presagio de que eso no va a acabar bien. xD Pero bueno, el presagio es lo de menos, las relaciones entre adolescentes suelen ser dinamita pura. Lo que no me convence es cómo se desarrollan esas relaciones.

Me vale como exponente del cine adolescente de los 80, pero para tildarla de clásico la veo floja.