Esperaba que la serie tuviera mas mala leche mas realismo mas de lo que fue ETA y su tiempo. Sin embargo por incapacidad, cobardía o simplemente para acercar esta historia a un publico lerdo e ignorante, los guionistas han decidido hacer de este proyecto un ejercicio de sensiblería irreal. Es un insulto, sobre todo para aquellos que vivimos en el País Vasco de ETA, contar con tanta simpleza, buenísimo y falsedad la concepción de la banda terrorista manipulando y cambiando los principios con los que inicialmente se definió. Suprime todos los prejuicios que alimentaron a su creación como lo fueron el racismo, el clasismo o la xenofobia, y que luego disimularon en un falso comunismo socialista para no ser repudiados de inmediato.

En cuanto a la complejidad y desarrollo de personajes, igualmente falsos y simplones con percepciones y mentalidades anacrónicos para la época y el lugar. Los actores, muy guapos, muy limpios y muy puros, pero tienen la capacidad interpretativa de una piedra.

Finalmente la ambientación como todo, irreal. Se nota que no se han esforzado en investigar la época o en buscar localizaciones mas acertadas para el rodaje. Cuesta creer que las ciudades y pueblos industriales de la Euskadi de los 60 estuvieran exentas de humo y mierda y lucieran tan pulcras.

En fin esperaba mas y como siempre Movistar me vuelve a decepcionar con otro de sus "Originales".