· Toretto y su pandilla son los más buscados de América y andan cortos de pasta, pero pasean al aire libre cuando les da la gana y consiguen cualquier cosa con un chasquido de dedos: ¿cómo va la mejor caja fuerte del mundo?, compramos una réplica; ¿un coche nuevo?, se lo ganamos a algún flipado de la carrera de enfrente; ¿hacemos un plan?, pillamos un centro de operaciones, cámaras, sistemas informáticos... ¿coches de policía, dices?, ahí mismo hay cuatro sin dueño. Que fácil es su puta vida.

· Eres un mafioso y sabes que unos paletos con coches te quieren robar pasta. La pones a recaudo y mandas buscar a esos molestos delincuentes para quitarlos de circulación. La policía se te adelanta, los detiene y los lleva al aeropuerto para extraditarlos. Perfecto, ¿no?, problema resuelto. Pues no, en un acto de subnormalidad extrema decides atacar los coches policiales para que escapen y matar a los agentes que los retenían. Jajajaja. ¿Y dices que controlas el cotarro de la ciudad?. Los cojones, mafioso de pacotilla.

· La escena del robo es un atentado al sentido común. Enganchan cables de los coches a la caja, que pesa toneladas y está llena a reventar, y la arrastran a 140 por la ciudad. Jajajaja. La escena es muy ridícula, ya parte de imposible pero además está hecha para ser lo más espectacular posible y es un no parar de reír. Dos coches tirando de la puñetera caja como si nada y a más velocidad que las decenas de vehículos que los persiguen. La caja, por su parte, destroza todo a su alrededor: farolas, aceras, edificios, personas, calles... destruyen media ciudad con la tontería, pero los coches van sobrados.

· El desafío del grupo Toretto a sus perseguidores. Así, como si nada, se dejan ver en un lugar público para que venga el arsenal de la ley a detenerlos, y en otra fantasmada más, de repente toda persona de por allí saca un arma y los polis se acojonan, con un Vin Diesel en plan ¨No estás en Estados Unidos, esto es Brasil¨. Claro, claro. Un país en el que no te conoce nadie pero donde todos morirían por ti, mientras las fuerzas especiales se acobardan ante esa gente que, curiosamente, pasea siempre con un arma bajo el brazo (¿seguro que no estamos en Estados Unidos?).
Lejos de quedarse ahí, le ponen un rastreador a los coches de los polis para que estos lo encuentren y localicen la señal de origen. Supongo que los guionistas dan por hecho que el espectador es gilipollas.

· Toda persona que se topa con Toretto termina ayudándole sin razón. No les llega con colarnos que O'Conner le deje escapar más de una vez y entre y salga de la policía como quien entra y sale de un bar. Ahora lo ayuda el jefe de las fuerzas especiales cuando su personaje se desvivía por atraparle. Le deja ir porque son los buenos. Sí, muy buenos, solo acaban de robar 100m$ destrozando media ciudad y matando un centenar de personas con la puta caja fuerte, llevan toda su vida atracando camiones y fugándose de la cárcel, riéndose de ti y tu puta ley de mierda. Pero déjales marchar, pobres, que son los buenos.

· Por patético que resulte el personaje de ¨The Rock¨ Johnson por lo anterior, lo es mucho más el de ¨AquíNoPintoNada¨ Pataky, que siendo también una poli no duda en ayudar a Toretto aunque a nadie le importe un carajo, pues su personaje solo está de relleno para meter un romance que nadie se cree y decir frases absurdas. Atención a cuando Toretto aparece en su casa para recuperar el colgante, debía de saber donde vivía gracias a sus poderes telepáticos.

· La escena postcréditos. Ahí estás tú, con residuos de las carcajadas producidas por esta basura, preguntándote si harán aposta estos subproductos, y de repente aparece una escena dejando entrever que el personaje de Michelle Rodriguez, al cual le metían una bala en la cabeza en la 4ª entrega, está vivo. Jajajaja. Me van a matar de la risa. ¿Y por qué no?, total, el guion ya es una puta mierda, un giro incoherente y forzado más no importa y nos sacamos de la manga otra peli.