Como ya sabemos, tuvimos una primera entrega de la tan aclamada saga protagonizada por Paul Walker y Vin Diesel, junto a un fantástico reparto de secundarios. Pero de repente, nos llego una segunda entrega, pero esta vez y con muchas preguntas en medio, solo contábamos con el protagonismo absoluto de Walker y, simplemente, no tuvo el éxito que tuvo su anterior entrega. El colmo llego en su tercera entrega, en donde ni siquiera contábamos con Walker en pantalla. Llego a un punto muerto, hasta que de repente se anuncio una nueva secuela y esta vez, si, con los tipos duros de siempre.

Cuando vemos el film, nos vamos dando cuenta de la cantidad de preguntas que nos va dejando el mismo; obviamente una de ellas es el por que de la curiosa ausencia de Letty y el horrible guion que nos dejan en bandeja de plata. Pero bueno, tal vez eso sea lo de menos, aquí no esperamos un espectáculo cinematográfico si hablamos de talento o drama; aun que, al ser el "regreso" de la saga, se podría haber convertido en una película mas personal.

A nivel de reparto, no hay mucha genialidad, pero ya sabemos que Walker y Diesel son los cabezas de la saga y en película que salgan juntos, hay éxito asegurado.

Las escenas de acción son y serán siempre espectaculares, pero seamos sinceros, aquí también queremos ver tiros y eso, me temo que aquí no hay prácticamente nada de eso.

Y para finalizar, la falta de tomas con los principales protagonistas de la película. Se crean dos historias que al final se entrecruzan y terminan como tenían que terminar. No es la mejor película del mundo, pero si quieres pasarlo bien, ahí lo tienes.